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HISTORIA DE RHILYA MYLIEN (RELATOS Y ROLES)

Publicado: 29 Nov 2022, 23:28
por Rhilya
EL COMIENZO

Día 2 del mes Shaldine

Una mariposa revoloteaba por el jardín, se posaba en distintas flores de colores como si de una danza se tratase. Era un jardín muy grande y cuidado, el camino empedrado que lo cruzaba desde la puerta principal hasta la mansión dejaba a un lado árboles frutales y exóticas plantas, y al otro lado un pequeño estanque con nenúfares. Había jardineros podando arbustos, hombres afanosos llevando bultos y alguna que otra mujer, vestida con uniforme de sirvienta, dándoles indicaciones. La mariposa alzó el vuelo, atravesó el camino y alcanzó un gran roble localizado a espaldas de la mansión. Rodeó tres veces el gran tronco y acabó posándose en una nariz con pequitas.

Rhilya estornudó saliendo de su ensimismamiento, dejó el libro que no estaba leyendo a un lado y observó como la mariposa salía volando. Suspiró, otro día más en Tar Valon. Hija de una familia noble de la ciudad, una casa menor, lo que básicamente se traducía en una vida aburrida. Al menos para ella. Clases de piano, historia, costura, algún baile al que aún no podía asistir y de los que su madre hablaba como si le fuera la vida en ello. Su padre era distinto, le consentía asistir a las clases de esgrima de su hermano menor Eynor, e incluso le dejaba practicar con la daga, a escondidas de su madre.

Rhilya se levantó y alisó el vestido azul oscuro con bordados de flores que llevaba puesto ese día, le gustaba mucho ese vestido, ya que resaltaba su cabello rojizo. Miro a ambos lados buscando a alguien.

— No está — pensó. — Quizás a la hora del almuerzo pueda encontrarlo por las caballerizas.

Salió disparada a buscar a Eynor, a esa hora ya debería haber terminado con sus tareas diarias y quizás podría convencerle de ir a dar una vuelta por la ciudad. Abrió la puerta trasera de la gran casa, atravesando las cocinas, a tiempo de ver cómo su madre, Hilda Mylien, de buen porte, acostumbrada a mandar, le exponía a los criados el mismo recital de todos los días.

— Buenos días, madre - dijo Rhilya apresurada, sin dar oportunidad a su madre de responder. Encontró a Eynor en su habitación, a diferencia de ella, él era moreno y de ojos marrones, si no fuese por que ambos tenían la misma sonrisa risueña y el mismo brillo en los ojos, nadie pensaría que fueran hermanos.

— Buenos días, Nori — saludó a su hermano mientras le daba un tierno beso en la mejilla — ¿Podemos irnos ya?

— Eh… — se sonrojó — Hoy no puedo Rhil. Había quedado en devolverle un libro a la hija de los Hayton.

— ¿Y cuánto tiempo tardas en devolver un libro? ¿Medio segundo? — se burló Rhilya — De acuerdo, no me des explicaciones…iré yo sola.

Le volvió a dar otro beso en la mejilla y salió del cuarto, decidida a no perder más el día. Fue en dirección al centro, su casa quedaba en la Avenida de la Torre Blanca, junto con otras mansiones de igual tamaño. No quiso avisar para preparar el carruaje, solo la entretendrían más y además, ella prefería caminar o montar a su yegua.

Pasó toda la mañana mirando escaparates, con preciosos vestidos, bordados espectaculares y telas maravillosas, y a la vuelta se detuvo a echar un vistazo en la armería, había dagas magníficas con empuñaduras muy finas y acero con adornos grabados. Trataría de convencer a su padre para que le regalase una cuando celebrase otro año más de vida.

Se apresuró a volver a casa cuando el sol irradiaba más calor, los trabajadores estarían ya terminando de almorzar. Recorrió las calles de Tar Valon, apenas apreciando su gran belleza de construcción Ogier, hasta llegar de nuevo a la casa. No reparó detalle en el gran escudo de familia que adornaba la puerta principal cuando la atravesó. Cruzó todo el camino dando saltitos hasta que llegó a las caballerizas, y como suponía allí estaba.

Galor era su amigo desde que tenía memoria, era un joven alto, rubio de ojos azules, tenía a todas las jovencitas suspirando por él. Era el hijo del maestro de esgrima de Eynor, íntimo amigo de la infancia de su padre, ambos se habían puesto de acuerdo para que Galor trabajase tanto en las caballerizas atendiendo a los caballos, como en el despacho, aprendiendo, según su padre, a ser un hombre. Todo eso lo compaginaba con el estudio, por lo que el último año, Rhilya solo había podido conversar con Galor en las horas del almuerzo, que era cuando tenia su descanso.

Lo saludó de lejos y se acercó.

— ¿Ya me echabas de menos? — sonrío Rhilya — He visto una daga increíble en la armería, te hubiera gustado.

— Rhil, te gustan todas las que ves, si fuera por ti tendrías una habitación llena de ellas — río por lo bajo y volvió a dar un bocado a su comida —- ¿Has practicado hoy? — se acomodó al lado de Rhilya mientras le sostenía la mirada.

Rhilya asintió, siempre lo hacía. Le encantaban esos ratos con Galor, hablaban de todo y de nada, incluso podían quedarse tumbados en el césped del jardín sin decir palabra, observando el cielo.

Hacia un día espléndido ese día, ni una sola nube auguraba lo que iba a ocurrir.

— ¿A qué hora te irás? — preguntó Rhilya con curiosidad.
— A media tarde, llegaremos al pueblo cuando caiga la noche, mañana tendremos mucha tarea eligiendo los nuevos caballos de monta.

Cuando la hora del almuerzo pasó, ambos volvieron a sus quehaceres hasta que la noche tomó el lugar.

Ya eran pasadas las diez, Inila hacía la última ronda por las habitaciones asegurándose que todo estaba en su lugar, había suficiente luz, las camas estaban preparadas y todo parecía estar en orden. Al llegar al cuarto de Rhilya, no pudo evitar soltar un chillido que inundó el pasillo de sirvientes. La niña estaba en el suelo, empapada en sudor y temblando.

Eynor acudió corriendo al escuchar la campanilla que hizo sonar la sirvienta, y tomó a su hermana en brazos llevándola hasta la cama. Hilda, entró en el dormitorio de su hija abrochándose la bata de fina seda, se arrodilló ante la cama y le toco la frente a Rhilya.

— ¡Llamad a la curandera, aprisa!- casi gritó la señora. Los sirvientes salieron de la habitación cual trolloc viniera detrás.— No te preocupes, todo pasará — musitaba, mientras cogía y estrechaba la mano de Eynor hacia sí.

Tras un tiempo de espera, Inila entraba en el dormitorio con Corenia Sedai, una mujer de rostro intemporal, ojos azules, una larga melena y una seguridad al caminar que tranquilizó a todos los presentes.

Aroh, tras hacer una gran reverencia, le acercó una cómoda silla a un lado de la cama. Corenia no tomó asiento, y dijo con voz suave:

— No se preocupe Lady Hilda, sanará — sin cambiar la expresión continuó — Ahora me gustaría que abandonaran el dormitorio, por favor, vos podéis quedaros Sra. Mylien.— Hilda indicó con un leve gesto que se retiraran y tomó asiento en una de las butacas sobrantes. Cuando todos se hubieran ido preguntó:

— Corenia Sedai, ¿qué es lo que le ocurre a mi pequeña? — las manos le temblaban — Es..¿grave?

Corenia no contestó, se acercó a la pequeña y le sujetó la cabeza, a la vez que Rhilya daba algún tumbo. Poco a poco todo cesó, y Rhilya parecía estar sumida un profundo sueño.

— Mi señora..tenemos ante nosotras a una chiquilla capaz de entrar en contacto con la Fuente Verdadera y utilizar el Poder Único.— La sedai esperó a que asimilara la reciente información y continuó — Sin las enseñanzas adecuadas podría morir en el intento de aprender por su cuenta, por ello...recomiendo que sea enviada a la Torre Blanca e inscrita en el libro de novicias. — los zafiros de la sedai escrutaron a la mujer intensamente, hasta que esta finalmente dijo:

— Así será hecho, Corenia Sedai.— la mujer suspiró y esbozó una sonrisa — Se inscribirá mañana mismo. — Besó la frente de Rhilya, mientras se levantaba. — Muchas gracias — la sonrisa de la mujer se ensanchó — Dígame qué puedo hacer para compensárselo.

— El simple hecho que haya otra pequeña con nosotras ya me satisface — una sonrisa se dibujó en su cara — El día 5 de este mismo mes espero verla por los pasillos de la Torre.— la señora Mylien hizo una leve reverencia e hizo sonar la campanilla, con la que apareció Inila.

— Acompaña a Corenia Sedai hasta la puerta, Inila — la sirvienta hizo una profunda reverencia y le indicó el camino a la Sedai.

Pasaron unos días, y el nerviosismo y entusiasmo de Rhilya se propagaban por toda la casa. Por fin una aventura, aprendería a utilizar el Poder Único algo que ni siquiera se había permitido imaginar. No tendría oportunidad de despedirse de Galor, pensó con una amarga sonrisa. Volvió a mirar la mochila de cuero que llevaría, puesto que sólo tendría que vestir las blancas ropas de novicia durante un tiempo, no metió muchas cosas. Un cepillo para el cabello con el mango de fina plata, su perfume preferido, aguja e hilo, varios pañuelos, una capa blanca con un broche dorado y unos zapatos blancos de muy buena calidad. Rhilya terminó de empacar con una gran sonrisa en el rostro, no sabía lo que le deparaba el futuro, pero lo que sí sabía es que fuera lo que fuera, era su destino.

(ROL) INGRESO DE RHILYA EN LA TORRE BLANCA

Publicado: 03 Dic 2022, 01:08
por Rhilya
Participantes: Rhilya, Kylerhia, Anari (interpretada por Kylerhia)
Punto de vista: Rhilya

Escalinatas de la Torre Blanca

El frontispicio de la Torre, que realza la escalera de anchos peldaños y las inmensas puertas de la entrada principal, da a una gran plaza publica. Mas alla de las puertas, se encuentran repartidas a lo largo de sus pisos las diferentes dependencias de la Torre, reservandose la mitad superior para los distintos ajahs y la Antecamara de| la Torre, lugar de reunion del organo de gobierno del mismo nombre. Desde aqui, no se perciben los daños ocasionados por el
reciente ataque de los Seanchan.
[Salidas: norte abajo]
Galor está aquí.
(Aire) (Abr) Kylerhia está aquí.
( 2) Una mujer mira con cierto temor la entrada de la Torre.
Una anciana sentada a un lado de las escaleras

Kylerhia se acerca caminando con gran majestuosidad hacia una joven muchacha que se sitúa junto a un muchacho a la entrada de la gran Torre Blanca.

Le haces una reverencia a Kylerhia.

Kylerhia dice 'Saludos, pequeña'

Rhilya se sigue poniendo nerviosa ante la presencia de una hermana.

Rhilya sonríe tímidamente.

Kylerhia dice 'No sé si habrás oído hablar de mí. Soy Kylerhia Sedai del ajah marrón, pero no
siempre estoy enterrada entre libros como muchas de mis otras hermanas.'

Dices 'Saludos, Kylerhia Sedai'

Kylerhia sonríe cálidamente a la muchacha.

Dices 'he oido hablar de vos, sedai, sus clases parecen ser muy interesantes'

Kylerhia dice 'Te he estado observando este tiempo que llevas aquí, y creo que ya va siendo hora de que te inscribas en el libro de novicias y empieces el aprendizaje más duro, disciplinado y
apasionante que durará toda tu vida.'

Asientes a lo que ha dicho Kylerhia.

Dices 'nunca imaginé que tendría la oportunidad de venir a la Torre Blanca, a decir verdad, es como si se hubiera cumplido un sueño que no me había permitido soñar'

Dices 'gracias por esta oportunidad, Kylerhia Sedai'

Kylerhia dice 'Desde este momento dejarás de tener un apellido, una familia o cualquier vínculo con el exterior hasta que seas hermana de pleno derecho o bien se te encomiende una misión. ¿Entendido? Desacatar esta norma, implicará una expulsión inmediata de La Torre cuando veamos que no eres un peligro ni para ti misma ni para la gente que te rodee. '

Dices 'si me permite hacerle una pregunta, ¿podré escribir a mi familia durante este tiempo? Sé que estarán más tranquilos si tienen noticias de mi de vez en cuando'

Kylerhia dice 'En un principio sí. Si es que no estás tremendamente cansada al final de la jornada y no se te envían más tareas adicionales para que así sea. De todos modos, la correspondencia es revisada por hermanas de pleno derecho y tarda en ser entregada.'

Asientes a lo que ha dicho Kylerhia.

Dices 'Gracias Kylerhia sedai'

Kylerhia dice 'Pero si de verdad quieres llegar a ser hermana de pleno derecho, pronto deberás de aprender a dejar de hacerlo.'

Kylerhia dice 'Ahora que ya está aclarado lo indispensable, sígueme al despacho de la maestra de las novicias, pequeña.'

Asientes a lo que ha dicho Kylerhia.

Con porte noble, Kylerhia se va hacia el norte.

Rhilya sigue a Kylerhia Sedai atravesando el vestíbulo de la Torre Blanca, subiendo unas escaleras hasta el despacho de la Maestra de Novicias.

Una Aceptada se dirige a tomar su lección.

Kylerhia dice 'Esta es la puerta pequeña, espero que no sea la última vez que nos veamos. Creo que tienes un gran potencial.’

Sonríes a Kylerhia.

Dices 'gracias por todo Kylerhia Sedai '

Le haces una reverencia a Kylerhia.

Rhilya duda si entrar al despacho de la Maestra de Novicias.

Rhilya da un gran suspiro y entra con firmeza al despacho de la Maestra de Novicias.

Kylerhia se aleja por el pasillo al ver que la futura novicia atraviesa la puerta al despacho de la
Maestra. Es una gran oportunidad para la Torre Blanca contar con aprendizas como ella.

Despacho de la Maestra de Novicias

Estas en el despacho de la Maestra de Novicias. Si eres una novicia o una Aceptada, y has sido llamada aqui, una de dos, o se te debe dar alguna noticia importante, o es que te has metido en problemas, y vas a ser castigada. El despacho es grande y lujoso, con bonitos muebles de encina, y sillas acolchadas. Una cortina semitransparente cubre el gran ventanal por donde entra la luz durante el dia.

Dices 'Saludos Sedai'

Le haces una reverencia a Anari Sedai.

Dices 'me indicaron que acudiese a su despacho'

Anari Sedai es una mujer esbelta, de cuello largo, que lleva un vestido de color naranja con pinceladas de tono amarillo, el Ajah al que pertenece. Si deseas aprender, ella te enseñará.

Anari Sedai está detrás de su escritorio revisando algunas cartas.

Anari Sedai está leyendo unos pergaminos atentamente cuando oye que la puerta se abre sin aviso previo.

Anari Sedai dice 'Saludos, pequeña. ¿No te han enseñado a llamar a la puerta?'

Te sonrojas intensamente.

Dices 'Disculpe Aes Sedai'

Dices 'han sido los nervios'

Anari Sedai sigue leyendo el pergamino hasta que termina, lo posa en la mesa y levanta la mirada.

Rhilya sostiene la mirada de la Maestra de Novicias con esfuerzo...aunque termina por bajar los
ojos.

Anari Sedai dice 'Está bien. Aún recuerdo cómo era entrar a este despacho siendo novicia. Pero que esta sea la última vez que una cosa así sucede o tendré que mandarte donde Laras a hacer turnos extra. '

Dices 'no se repetirá, Aes Sedai'

Anari Sedai dice 'Tú debes de ser...'

Dices 'Rhilya'

Sonríes alegremente.

Anari Sedai echa un vistazo a un pergamino en concreto.

Rhilya se fustiga mentalmente por su impaciencia.

Anari Sedai dice 'En efecto, tú debes de ser la pequeña Rhilya.'

Anari Sedai dice 'Estás aquí para inscribirte en el libro de novicias. ¿Eres consciente de lo que eso conlleva?'

Dices 'he nacido y crecido en Tar Valon, he visto muchas mujeres acudir a la Torre Blanca, y a las
Aes Sedai por las calles, aquí todo el mundo habla de vuestras hazañas y el duro entrenamiento que conlleva aspirar a ser una hermana de pleno derecho...no se si soy consciente de todo lo que
supone, pero se que estoy dispuesta a pasar por todo lo que sea necesario para llegar a serlo
algún día'

Rhilya respira profundo tras soltar todo lo que llevaba dentro.

Rhilya mira con timidez a la Maestra de Novicias.

Anari Sedai dice 'No asumas cosas tan pronto, pequeña. Pero está bien.'

Anari Sedai coge el grueso Libro de Novicias y escribe con pulcritud el nombre de la joven. Cuando termina de escribir esparce un poco de arena para que la tinta se seque y vuelve a cerrar el libro.

Anari Sedai dice 'Bueno, pequeña. Pues ya eres novicia de pleno derecho.'

Rhilya no tiene ni idea de lo que le espera, ni siquiera sabe si llegará a ser hermana algún día,
pero está muy orgullosa de pertenecer a la Torre Blanca.

Sonríes a Anari Sedai.

Dices 'muchas gracias, espero no defraudarla'

Anari Sedai dice 'Yo espero no verte por aquí demasiado a menudo.'

Te ríes disimuladamente.

Asientes con un gesto de cabeza.

Anari Sedai dice 'Dicho esto, ¿tienes algún conocimiento ya asimilado sobre El Poder Único?'

Dices 'lo único que he logrado es encender una llamita, pero me dijeron que no podría volver a
encauzar sin estar una hermana o aceptada presente'

Dices 'Asi que no lo he vuelto a intentar'

Anari Sedai dice 'Y así es. Jamás debes encauzar a solas o con otras novicias. Aún no tenéis el control para no haceros daño.'

Anari Sedai dice 'Pero estando yo delante, ¿podrías intentar encender dicha llama, pequeña?'

Asientes con un gesto de cabeza.

Rhilya estaba deseando que se lo pidieran.

Te abres a la Fuente y sientes el Saidar.

Rhilya mira de reojo a la hermana, como pidiendo permiso para encauzar.

Empiezas a concentrarte para tejer 'luz'.

Extiendes la mano y aparece una brillante bola de luz ante ti.

Das una brillante bola de luz a Anari Sedai.

Sueltas el Saidar.

Sonríes alegremente.

Anari Sedai dice 'Muy bien, pequeña. Has conseguido avanzar más rápido que la mayoría de las que llegan a mi despacho. Eso es una buena señal.'

Rhilya está muy contenta

Anari Sedai dice 'Ahora debes encaminarte a tu primera lección como novicia.'

Asientes a lo que ha dicho Anari Sedai.

Dices 'Maestra, me pidieron cuando llegué que realizara una serie de tareas que debía enseñarle a vos cuando fuera el momento'

Anari Sedai dice 'Así es, pequeña.'

Rhilya le enseña las tareas encomendadas.

Anari Sedai asiente con la cabeza concentrada.

Anari Sedai dice 'Veo que lo tienes todo completo. Muy bien, pequeña. Ahora apresúrate o llegarás tarde a la lección.'

Asientes con un gesto de cabeza.

Rhilya realiza una reverencia a la Maestra de Novicias y se apresura a salir del despacho para comenzar con las clases.

NOVICIA DE LA TORRE BLANCA

Publicado: 03 Dic 2022, 15:37
por Rhilya
Día 20 del mes Shaldine

Un destello…me muevo en la cama.
Dos destellos…una sonrisa se dibuja en mi mente.
Tres destellos…una voz, una risa, casi alcanzo a reconocer el rostro que aparece en mi sueño.
Un susurro con un nombre me despierta de un sobresalto.

Enciendo la vela de la mesita de noche que se ubica al lado de mi cama y me levanto buscando la jofaina para lavarme la cara. Es la tercera noche que tengo este sueño, no logro entender de qué se trata aunque me resulta tan familiar esa voz. El nombre que escuché se queda grabado en mi mente y por alguna razón, creo que en verdad lo conocí, quizás fue en otra vuelta de la Rueda.

Termino de lavarme el rostro y me asomo por la ventana, queda poco para que suenen las campanadas que pondrán a todas las novicias a corretear para no llegar tarde a sus clases de primera hora.

Es mi tercer día como novicia y no quiero llegar tarde a clase. Me apresuro a vestirme de blanco, me miro al espejo y termino de peinar los mechones sueltos que andan alborotados alrededor de mi rostro. Sonrío con satisfacción, el blanco me queda bien, podré acostumbrarme por el momento.

Salgo por la puerta sin hacer ruido, mi compañera de cuarto sigue dormida y no quiero robarle sus últimos minutos de sueño. Me gusta el olor que se respira por las mañanas en la Torre Blanca, es una mezcla entre el olor a hierba bañada con rocío que proviene de los jardines de la Torre y el olor a pan recién hecho que te inunda según te acercas a las cocinas.

Termino mi paseo matutino cuando los pasillos se inundan de novicias apresuradas, acudo al comedor para tomar el desayuno, compuesto por pan, leche y fruta. Eyra, una de las novicias que entraron al tiempo que yo entré, me sonríe al otro lado de la mesa. Damos cuenta del desayuno y acudimos juntas a la primera clase del día “Historia de la Torre Blanca”, donde aprenderemos acerca de la arquitectura y arte de la Torre Blanca, normas y costumbres de las Aes Sedai, nombres de todas las Sede Amyrlin y sus Guardianas y demás conocimientos necesarios acerca de la institución de la que afortunadamente ya formo parte. La Aes Sedai que nos imparte esta clase es Kylerhia Sedai, ella fue quien me consideró preparada para acudir a la Maestra de Novicias, asi que a pesar de no conocerla demasiado ya la tengo en estima.

Tras la primera clase, viene la segunda acerca del Poder Único, el Saidar y el Saidin, nos dejan abrirnos a la Fuente Verdadera y sentir el Saidar fluyendo a través de nosotras, como si de un río se tratase, nos indican que debemos rendirnos a él, y que solo así podremos controlarlo. Es una sensación indescriptible, el Saidar mi inunda, siento como se me eriza cada fibra de mi cuerpo, el calor asciende hasta mi rostro que se enciende ruborizado, noto como percibo absolutamente todo, hasta la fragancia mas sutil. Nos obligan a soltarlo, haremos este ejercicio todos los días hasta que nos habituemos a esta maravillosa sensación. La sensación de pérdida es horrible, siento un agujero en mi interior, que poco a poco mitiga hasta volverse una pequeña sombra, que no desaparece, pero disminuye.

Repetimos el ejercicio durante toda la mañana hasta que se acerca la hora del almuerzo, y las novicias debemos acudir a las cocinas para ayudar a Laras a prepararlo todo. Hoy tenemos costillas de cerdo con patatas acompañadas de una ensalada con productos del huerto. No he cocinado en mi vida, así que me dedico a cortar las hortalizas que me indican las ayudantes de Laras. Cuando la comida esta preparada, servimos las mesas y nos disponemos a comer.

El comedor está a rebosar, por lo visto últimamente hay más novicias de las que hubiera antaño, a lo lejos veo las mesas de los cachorros y Guardianes. Le busco pero no le veo, sé que no debo distraerme con ningún hombre, pero es mi amigo y le echo de menos. Degusto la comida como si fuera el mayor manjar que he probado, abrazar el Saidar y sentir el Poder Único fluyendo a través de tu cuerpo, da mucho hambre. Rebaño la salsa de las costillas con una rebanada de pan y doy cuenta hasta de las migajas que sobran.

Esta tarde, tras fregar todos los platos en las cocinas, tenemos que encender las chimeneas de las habitaciones de las Aes Sedai, limpiar los vestíbulos y tomar otras dos clases de Geografía y Filosofía.

Cuando acaba la jornada estoy tan agotada que apenas atino a quitarme el vestido, las medias y los zapatos, caigo en la cama rendida y el sueño se apodera de mí como cada noche.

Del mismo modo transcurren días, semanas y meses. Realizando tareas de limpieza, costura, cocina, clases de Historia, Geografía, Filosofía, Antigua Lengua, Prácticas con el Poder Único, Ejercicios de autocontrol y meditación...dormir y volver a empezar. El duro trabajo diario va forjando el carácter de esta pequeña novicia.

(ROL) BIBLIOTECA DE LA TORRE BLANCA

Publicado: 29 Dic 2022, 22:31
por Rhilya
Participantes: Galor y Rhilya
Punto de vista: Rhilya

Aula de novicias

Zelanna Sedai se pasea por el aula mirando a las novicias. Es una Aes Sedai del Ajah Marron. Tiene el pelo canoso por lo que deduces que debe de ser muy anciana, además es una reputada erudita de la Torre.

Zelanna Sedai dice ‘Ya podéis recoger, os dejaré en la Biblioteca, espero que la lección de hoy os haya quedado clara. Para mañana quiero que conozcáis el procedimiento de neutralizar guarda a la perfección pues nos pondremos a practicarla hasta que seáis capaces de hacerlo sin pensar siquiera en ello.

Las novicias se miran unas a otras, algunas con emoción, otras, casi al borde del llanto. Recogen sus cosas y salen apresuradas siguiendo a Zelanna Sedai hacia la Biblioteca de la Torre Blanca.

Recojo mis libros y me dispongo a seguir a Zelanna Sedai hacia la biblioteca, la clase de hoy ha sido magnífica. A pesar de ser oriunda de Tar Valon, no dejan de fascinarme las Aes Sedai, no me acostumbro a la idea de que algún día pueda a llegar ser una de ellas.

Una de las novicias que se sentaba conmigo se apresura para ponerse a mi lado y juntas llegamos a la descomunal biblioteca.

La gran biblioteca de la Torre Blanca

El interior de la biblioteca es seco y fresco, un ambiente Ideal para la conservación del material que contiene. Hay varias Aes Sedai del Ajah Marron por las salas, pues este ajah es el responsable de la obtención y conservación de la vasta colección de libros y pergaminos que hacen de la biblioteca de la Torre la mayor reserva de conocimiento del mundo reunida en un único lugar.

Zelanna Sedai se despide de nosotras dejándonos a nuestra merced. Los tomos de distintos tamaños, algunos de ellos muy antiguos, atestan las estanterías hasta donde nos llega la vista. Me acerco a una zona más o menos tranquila, busco por las estanterías el tomo adecuado para el estudio de hoy. Mi compañera se ha sentado en una de las mesas, así que la acompaño.

Zelanna Sedai deja a las novicias que tomen sitio y se aleja en dirección a su despacho.

Una Aes Sedai ha llegado desde el sur.

Rhilya coge un libro muy pesado de la estantería y se sienta.

Rhilya abre un libro titulado “Cómo aprender a tejer una guarda defensiva: Introducción”.

Rhilya suspira pasando las hojas...

Galor entra al lugar tranquilamente, pensando en encontrar algún libro entretenido.

Galor piensa 'Aquí debe haber algo más aparte de tanto conocimiento….'

Rhilya lee 'Mientras dure esta salvaguarda, el encauzador tiene una pequeña probabilidad de destruir una salvaguarda, sellar o escudar, que vaya a afectarle antes de que ocurra el efecto.

La mirada del cachorro se pasea por el lugar y segundos después se dirige hacia una de las
estanterías al azar.

Rhilya lee 'Afinidades: Agua Aire Energia Fuego Tierra.'

Rhilya frunce el ceño.

Galor rebusca entre los libros, tornando el rostro a uno de fastidio.

Una Aes Sedai se va hacia el sur.

Susurras 'flujos de todas las afinidades?'

Rhilya hace una mueca sin ocultar su ignorancia.

No entiendo nada, tendré que hacerme pequeñas anotaciones y repasarlas hasta que me caiga de sueño, no puedo defraudar a Zelanna Sedai.

Galor se gira fastidiado y avanza hacia el otro lado de la biblioteca, no puede ser que toda esas
estanterías sean de política.

Rhilya susurra a otra novicia 'cómo se supone que voy a diferenciar los flujos? son de colores?’

La novicia se gira hacia Rhilya, una gota de sudor le cae por la frente.

Una novicia dice ‘no lo sé, esto…no se si voy a poder soportar esta presión, cómo voy a aprenderme todo esto para mañana?’

Una novicia se levanta llorando y sale de la Biblioteca.

Galor vuelve a mirar a su alrededor y sonríe al localizar a Rhilya, que está sentada de espaldas enfrascada en un inmenso volumen, su cabello rojizo es inconfundible.

Olvidada la idea de encontrar un libro para pasar el rato de descanso, el cachorro trata de acercarse sigilosamente a la chica para asustarla.

Rhilya pasa las páginas ensimismada en la lectura, bosteza y se centra en un párrafo.

Galor sonríe con malicia y le pone una mano en el hombro a la novicia.

Dices 'eso no hay quien lo entienda'

Galor dice 'Buh!'

Rhilya pega un chillido.

Rhilya se tapa la boca.

Rhilya se gira enfadada.

Dices 'Luz!!'

Susurras 'qué haces aqui?!’

Rhilya mira a todos lados cerciorándose de que no hay nadie cerca de ellos.

Galor sonríe alegremente.

Galor susurra 'Leer, como todo el mundo'

Rhilya actúa enfadada, pero no puede disimular el brillo en sus ojos.

Galor…por fin. Me he paseado día si día también por los Jardines de la Torre por si llegaba a verle, se me hace muy duro no tener la libertad de acercarme a hablar con él cuando de refilón le veo practicar en los patios de entrenamiento. Acostumbrada a disfrutar de su compañía desde que somos niños, esta nueva etapa, aunque no la cambiaría por nada, sería más completa si pudiéramos tener más tiempo para hablar.

Susurras 'pero si tú no sabes leer'

Te ríes disimuladamente.

Galor susurra '¿Eso quién lo dice?'

Dices 'eso lo dice la chica que te ha visto escabullirte de las clases del Maestro Zindel, prefiriendo irse a dar espadazos a coger un libro… '

Le sacas la lengua a Galor.

Rhilya se da la vuelta y cierra el libro.

Galor echa un vistazo al libro que la chica estaba mirando. Salvaguardas…. ¿Eso se come?

Galor dice 'Es más divertido dar espadazos, sí'

Rhilya coge el libro de la mesa y se gira hacia Galor.

Galor dice 'Pero las aventuras del Galopador eran interesantes'

Te partes de risa.

Rhilya le da el libro a Galor.

Dices 'toma, a ver si descifras algo'

Rhilya se apoya en la mesa y mira a Galor.

Galor abre una página al azar.

Galor frunce el ceño mientras lee: Afinidad: Aire. Con este tejido...

Rhilya observa a Galor divertida cuando pone caras raras según lee.

Galor dice 'Qué es una afinidad?'

Suspiras profundamente.

Galor tiene la sensación de que ha olvidado algo, pero no sabe el qué.

Dices 'no se ni como explicártelo...'

Dices 'las encauzadoras utilizamos ciertos elementos para encauzar los tejidos…Tierra, Aire.. estos influyen en qué tipo de flujos se deben encauzar’

Dices 'y a eso se le llama afinidad, de todas formas no creas que lo termino de entender’

Suspiras profundamente.

Galor dice 'Oye, Rhil...'

Galor dice 'Aquí pone que los encauzadores podéis mover cosas con el aire...'

Galor deja el libro sobre la mesa.

Dices ‘si… ¿quieres que te agite por los aires?’

Rhilya cierra los ojos y frunce el ceño fingiendo que abraza la Fuente.

Sonríes malévolamente.

Galor dice 'No, quieta!'

Te ríes disimuladamente.

Galor dice 'Me refería a que... si puedes mover cosas por los aires...'

Rhilya observa curiosa a Galor.

Galor pregunta 'Podrías volar?'

Dices 'mmMMmmMMmmMMmm'.

Dices 'creo que no, al menos no conozco a nadie que vuele, pero..'

Dices 'si que me han hablado de un tejido'

Rhilya se acerca a una de las estanterías.

Rhilya coge un tomo titulado “Los orígenes del tejido Levitar”.

Rhilya le da un tomo a Galor.

Dices 'hay un tejido que te permite flotar, utilizas flujos de aire para impulsarte hacia arriba'

Galor ojea el libro con curiosidad, pero obviamente no entiende nada.

Dices 'no creo que se considere volar...pero quizás sea lo mas parecido'

Dices 'para poder levitar se necesita controlar muy bien los flujos de aire, endurecer el entorno y
casi seria como si te empujase hacia arriba'

Suspiras profundamente.

¿Acaso seré capaz de realizar ese tejido alguna vez? Sería increíble.

Galor dice '¿Y esto se supone...'

Galor deja el libro en su sitio.

Galor dice 'Definitivamente, dar espadazos es más fácil'

Dices 'pero creo que para poder hacer eso me quedan años'

Galor sonríe alegremente.

Dices 'si es que llego'

Galor dice 'Tan pronto te rindes, Rhil?'

Dices 'a veces me frustro, avanzo deprisa según mis maestras, pero aun así'

Galor aparta una silla para sentarse al lado de su amiga.

Dices 'no podemos practicar a solas, creo que si pudiera avanzaría mas deprisa'

Galor dice 'Mi padre siempre decía que había que empezar siempre por el principio'

Rhilya sonríe al recordar los refranes del padre de Galor.

Galor dice 'que intentar avanzar sin tener las bases de la esgrima dominadas era perder el tiempo y hacerse daño'

Dices 'como siempre tu padre tiene razón'

Galor dice 'Supongo que algo así se aplicará a vuestro... Poder poderoso o como se llame'

Dices 'he avanzado bastante, las luces que hago son preciosas'

Te ríes disimuladamente.

Dices 'también he aprendido a curar pequeñas heridas'

Galor dice 'Mira, eso está bien'

Dices 'pero el que más me gusta'

Galor dice 'Así podrás...'

Galor cierra la boca, dejándola hablar.

Dices 'son los brazos de aire, puedo dar latigazos a unos maniquíes con tan solo mirarlos’

Sonríes alegremente.

¿Qué habrá querido decirme? A veces Galor es tan parco en palabras, detesto cortarle las frases.

Galor dice 'para qué quieres darle latigazos a los maniquíes?'

Dices 'no es que quiera darle latigazos a los maniquíes, cazurro…'

Rhilya mira hacia el infinito cogiéndose las manos al hablar.

Dices 'en el futuro podré ir a una gran batalla, y ayudar a mis futuras hermanas frente a los Engendros de la Sombra'

Rhilya sueña despierta.

Galor rompe a reír.

Rhilya le da un empujón a Galor.

Dices 'no te rias tonto’

Galor dice 'Tú en una gran batalla contra engendros de la sombra?'

Dices 'claro que si!'

Galor dice 'Te comerían, Rhil.'

Galor dice 'Eres enana.'

Dices 'pues para eso tendré a mis guardianes'

Dices 'que me protegerán mientras atizo a los Trollocs con mis brazos de aire'

Rhilya sacude las manos como si lanzase bolas de fuego.

Galor sonríe alegremente.

Sonríes alegremente.

Galor dice 'Quiero ver eso'

Rhilya se queda pensando por un momento.

Dices 'si consigo ser hermana Galor, elegiré el verde'

Galor se queda pensativo durante unos segundos.

Galor dice 'el verde...'

Galor dice 'qué tiene de especial el verde?’

Dices 'nos han explicado las funciones de todos los Ajah, y el verde es el Ajah de la Batalla'

Dices 'están al frente del ejército de la Torre Blanca'

Galor te mira.

Galor niega con la cabeza.

Dices 'y son las primeras que irán a luchar contra los Engendros del Oscuro'

Dices 'yo quiero estar ahi'

Galor dice 'No te veo yo a ti al frente de ningún ejército.’

Galor susurra 'Ni a mi entrenando con guardianes, y mírame’

Frunces el ceño por lo que Galor ha dicho.

Dices ‘Que me guste vestir bien, no quita que quiera enfrentarme al Oscuro y luchar por la Luz'

Rhilya se cruza de brazos.

Será idiota. ¿Acaso me ve así? Como una niña tonta que solo le preocupan los vestidos y los adornos bonitos. Sé que no es así, él sabe cómo soy, estaba allí cuando me metí por el callejón que no debía y trataron de asaltarme. Si no hubiera sido por él habría acabado todo mucho peor, pero me enfrenté a ellos, e incluso le llegué a hacer un corte a uno de ellos con mi daga. Sabe que no me detendré por nada. La idea que me rondaba hacía tiempo volvió a mi cabeza.

Susurras 'llegué a pensar que....'

Rhilya se calla.

Galor la mira interrogante.

Galor dice 'HM?'

Rhilya levanta la mirada hacia Galor.

Suspiras profundamente.

Dices 'pensé que quizás'

Dices 'que quizás querrías ser mi guardián'

Rhilya aprieta los labios como si no quisiera decir más.

Ya está, lo he soltado. Sabía que quería que Galor fuese mi Guardián desde el momento en que me dijeron que podía encauzar y tendría que ir a la Torre Blanca. No quiero que me diga que no.

Galor sonríe alegremente.

Rhilya se da la vuelta.

Galor dice 'Quizás, Rhil, quizás'

Miras de reojo a Galor.

Galor dice 'De momento tengo que superar los entrenamientos'

Suspiras profundamente.

Galor dice 'Si lo consigo…'

Galor dice 'Será un placer sacarte de los líos con una capa que cambia de color'

Galor sonríe alegremente.

Te ríes disimuladamente.

Si, si, si! Ha dicho que sí.

Dices 'a lo mejor soy yo la que te saca a ti de líos...'

Rhilya sigue enfurruñada, pero tiene una sonrisita en los labios.

Galor dice 'Claaaaro'

Galor sonríe alegremente.

Galor dice 'Eso sí.'

Rhilya mira a Galor con curiosidad.

Galor dice 'Si soy tu guardián...'

Dices 'qué?'

Galor dice 'Quiero que me prometas que tendrás paciencia y que te lo tomarás con calma'

Suspiras profundamente.

Dices 'y yo quiero que me prometas que no lo harás por obligación, si no porque realmente lo
quieres'

Galor dice 'Escúchame, enana'

Galor sonríe alegremente.

Pestañeas inocentemente.

Galor dice 'Si no quisiera estar aquí seguiría cuidando caballos y limpiando cuadras'

Sonríes a Galor.

Dices 'me lo prometes?'

Galor dice 'Claro que sí'

Rhilya se lanza a Galor y le da un abrazo.

Rhilya sonríe a Galor mirándole a los ojos.

Galor le devuelve el abrazo.

Dices 'entonces yo también te prometo tener paciencia’

Le das un besito en la mejilla a Galor.

Rhilya vuelve a su sitio.

Galor dice 'Y dime, ya tienes pensado a mi compañero de espadas?'

Galor dice 'Tengo que empezar a sacarlo de sus casillas'

Te partes de risa.

Dices 'aun no, tienes algún compañero que merezca la pena?'

Galor dice 'Pues no lo sé'

Galor dice 'pero estaré atento'

Dices 'preséntame a quien creas que podría ser tu hermano'

Dices 'y entonces, lo aceptaré'

Galor dice 'También puedes escogerlo por ti misma'

Será tonto.

Dices ‘lo sé…no creas que quiero pedirte permiso. Por lo que he oído, el vínculo es una unión tan fuerte y especial….que me gustaría que entre vosotros también existiera un fuerte lazo.

Dices 'he observado a alguno de los jóvenes, no te creas..'

Galor la mira con curiosidad.

Galor dice 'os dejan observarnos hacer el ridículo con las espadas?'

Te ríes disimuladamente.

Dices 'si, mientras repasamos en los jardines, aprovechamos para repasar otras cosas'

Te ríes disimuladamente.

Galor ríe disimuladamente.

Dices 'aunque por lo pronto solo me he fijado en ti, esperaba que me dijeses que si'

Galor dice 'Qué otra cosa iba a decirte?'

Galor dice 'Me colé en el estudio de tu padre mientras hablaba de no se qué cosa de negocios para enterarme de dónde estabas'

Galor se levanta de la silla y suspira.

Galor dice 'A alguien se le olvidó dejarme una nota o algo'

Galor te despeina cariñosamente.

Rhilya sonríe a Galor cariñosamente, sabe que siempre se ha preocupado por ella, aunque le cueste demostrar sus sentimientos.

Galor dice 'En fin... Sigo con mi entrenamiento, que aquí la pereza está mal vista'

Galor se acerca a la chica y la estruja en un abrazo.

Rhilya le da un pellizco a Galor en el costado.

Galor dice 'Eh!'

Le sacas la lengua a Galor.

Dices 'vete a entrenar…aspirante a Cachorro'

Dices ‘manténme informada si ves a algún muchacho que merezca la pena, quiero elegir bien, a ti ya te tengo bien elegido'

Te ríes disimuladamente.

Galor te mira una última vez, te sonríe y se aleja.

Rhilya observa como Galor se va.

Rhilya vuelve a sus libros.

Voy a dominar la teoría de este tejido para mañana, solo necesito concentrarme lo que queda de día y lo conseguiré.

Rhilya sonríe al pensar en Galor y en su conversación.

Aprenderé todo lo que me enseñen, me levantaré al alba, fregaré suelos y sudaré sangre si es necesario. Alcanzaré el chal y le demostraré a este tonto aspirante a Cachorro que soy digna de llevar el chal verde y enfrentarme a la Sombra. Estará orgulloso de mí.

(ROL) JARDINES DE LA TORRE BLANCA

Publicado: 29 Dic 2022, 23:54
por Rhilya
Participantes: Rhilya y Kylerhia
Punto de vista: Rhilya

Jardines de la Torre Blanca

La huella de los constructores Ogier esta patente en esta zona de la Torre Blanca, ya que libres del rigido diseño de la Torre ordenado por las Aes Sedai, los jardines son un agradable y colorista lugar, con arboles, hierba, y flores. Un lugar donde las hermanas pueden pasear, las novicias cuchichear, y las Asentadas maquinar. Al norte otra parte del edificio anexo a la Torre contiene las aulas y salas donde estudian y practican las novicias y las Aceptadas.

Rhilya está sentada en la hierba, ensimismada en un libro.

Una novicia ha llegado desde el norte.

Kylerhia dice 'Saludos. Rhilya, ¿verdad?'

Rhilya levanta la cabeza y duda al saludar.

Dices 'Saludos...mmm Kylerhia?’

Kylerhia es una mujer de estatura media y complexión delgada. Su pelo es pelirrojo y sus ojos azules.

Kylerhia se sacude la falda del vestido que tiene alguna mota de polvo.

Kylerhia dice 'Así es. Hemos coincidido en bastantes lecciones.'

Rhilya deja el libro de lado y se centra en la novicia

Kylerhia se acerca a la muchacha y con un gesto de la mano pregunta si puede sentarse al lado de la muchacha.

Rhilya asiente con una sonrisa y aparta el libro para que Kylerhia pueda sentarse.

Kylerhia se sienta en la hierba junto a la muchacha y se arregla el vestido para que no se arrugue.

Rhilya se gira mirando a Kylerhia.

Dices ‘Perdona que te pregunte esto… tienes algo que ver con Kylerhia Sedai...?'

Dices ‘Lo siento, seguro que te habrán hecho esta pregunta muchas veces'

Kylerhia dice 'Es una vieja amiga de mi madre, en efecto.'

Rhilya sonríe recordando a la Aes Sedai, le preocupa no haberla visto últimamente.

Kylerhia dice 'Pero no sé nada sobre su paradero. Aún no he recibido respuesta de ella y nadie aquí ha querido decirme nada.'

Dices ‘Ella fue quien me recibió cuando llegué'

Dices 'desde entonces no la he vuelto a ver'

Dices 'de esto ya hace meses'

Kylerhia dice 'Yo no he llegado a verla en la Torre, solamente alguna vez que venía de visita a
Cairhien y acompañaba a mi madre.'

Rhilya se acomoda abrazándose las piernas y apoyando la cabeza en las rodillas.

Rhilya mira a Kylerhia.

Dices 'espero que no le haya sucedido nada malo'

Una novicia ha llegado desde el norte.

Kylerhia dice 'Yo también, la verdad.'

Kylerhia suspira con la mirada perdida en el horizonte.

Rhilya mira a la novicia que acaba de llegar, debe ser de otro grupo pues no la conoce.

Kylerhia girando la cabeza para mirar a la joven pregunta: ¿Y tú? ¿De dónde vienes?

Dices 'Soy de aquí de Tar Valon, mi casa está a unas calles de aquí'

Kylerhia dice 'Entonces ya conoces todo este mundo de sobra.'

Kylerhia dice 'Las Aes Sedai, los Gaidin...'

Una novicia dice 'me puedo sentar con vosotras? '

Asientes a lo que ha dicho Kylerhia.

Kylerhia dice 'Sí, supongo que sí.'

Kylerhia mira a Rhilya buscando confirmación por su parte.

Dices 'claro, acompáñanos si te apetece’

Una novicia se sienta en el suelo y se pone a descansar.

Dices 'eres de Cairhien has dicho?'

Kylerhia dice 'Así es. No sé si te sonará la familia Dan'Nishar.'

Rhilya hace memoria.

Dices 'se me daban un poco mal las clases de las familias, Kylerhia, lo siento’

La novicia debe tener unos 12 años y está con ojos como platos mirando a las chicas, mayores que ella.

Kylerhia dice 'Tranquila, hay tantas familias nobles solo en Cairhien que a cualquiera se le olvidaría...'

Kylerhia dice 'Y tú, ¿pequeña? ¿De dónde eres?'

Una novicia se sonroja intensamente.

Una novicia susurra 'de Caemlyn..'

Una novicia dice 'mi madre es posadera '

Una novicia sonríe alegremente.

Kylerhia dice '¡Anda! Si somos todas de grandes urbes...'

Kylerhia dice 'Si es posadera te ha alimentado estupendamente, eso desde luego'

Una novicia ríe disimuladamente.

Una novicia se sonroja intensamente.

Dices 'conoces la familia Mylien?'

Kylerhia dice 'Así es.'

Rhilya levanta la mano

Te ríes disimuladamente.

Kylerhia dice '¡Anda!'

Una novicia dice 'disculpad, acabo de recordar que Zelanna Sedai me hizo un encargo'

Una novicia se sonroja intensamente.

Una novicia se levanta atropelladamente.

Una novicia se pone de pié.

Una novicia se va corriendo.

Kylerhia dice 'Hasta luego, pequeña'

Kylerhia mira a Rhilya con una sonrisa en los labios.

Te ríes disimuladamente.

Dices 'mas le vale correr'

Kylerhia dice 'Esta juventud...'

Kylerhia dice 'Encima Zelanna Sedai... '

Dices 'menos mal que conseguí aprenderme el tomo de neutralizar...'

Dices 'pensé que hoy nos cocinaba vivas si no conseguíamos realizar el tejido'

Kylerhia dice 'Totalmente de acuerdo...'

Rhilya se tumba sobre la hierba.

Kylerhia dice 'Menos mal que esto del poder no se nos da mal... Si no acabaríamos dentro del puchero de Laras'

Te ríes disimuladamente.

Kylerhia ríe con disimulo.

Dices 'a ti ya te ha llamado Laras para fregar antes del alba? '

Kylerhia dice 'Así es, la primera semana. Al primer toque de la campana tenía que levantarme e ir
corriendo'

Dices 'a Neida la pillaron en una chiquillada'

Dices 'estuvo fregando antes de la primera campana durante dos semanas'

Kylerhia dice 'En mi caso faltaban novicias. Pero Neida... ya sabes cómo es.'

Te partes de risa.

Kylerhia dice 'He oído que ha ido alguna vez al despacho de la Maestra...'

Dices 'espero que no tenga que llamarme demasiado'

Dices 'todas salen con unas caras largas...'

Kylerhia dice 'Yo también... No me apetecería ser azotada...'

Dices 'oye'

Kylerhia dice 'Dime'

Rhilya se incorpora.

Dices 'te apetece que vayamos al patio de entrenamiento?'

Kylerhia asiente con emoción.

Dices 'me gusta pasearme y echar un ojo a los chicos, me parecen tan graciosos con las poses que intentan poner’

Te partes de risa.

Kylerhia dice 'Son muy graciosos, sí. Pero también guapos…'

Kylerhia dice 'A ver a quién nos encontramos...'

Kylerhia dice 'Pero las vistas no van a defraudarnos, dalo por hecho. ¿Te has fijado en alguien ya?'

Kylerhia mira con curiosidad a Rhilya.

Kylerhia se recuesta en la hierba usando sus brazos como almohada.

Kylerhia susurra 'y hay soldados que tampoco están nada mal…'

Dices 'yo conozco a uno..'

Kylerhia dice '¡Cuéntamelo todo!'

Sonríes a Kylerhia.

Dices 'le conozco desde siempre'

Kylerhia dice 'Vaya, vaya...'

Dices 'me siguió a la torre cuando se enteró que tenia que venir aquí'

Kylerhia sigue con muchísimo interés la historia de la novicia.

Kylerhia dice 'Enamoradizo por lo que parece...'

Niegas con la cabeza, no no.

Dices 'Galor es mi amigo, siempre ha cuidado de mi'

Kylerhia dice 'Ya, claro...'

Kylerhia dice '¿Y no crees que él pueda verte de otra manera?'

Dices 'estoy demasiado acostumbrada a hablar con él todos los días, y ahora...pues es raro no poder hacerlo '

Rhilya mira hacia otro lado.

Kylerhia dice 'Quizá eso os cambie la perspectiva y aprendáis a apreciar los encuentros desde otra perspectiva...'

Kylerhia dice 'Quién sabe. La Torre Blanca nos cambia a todos.'

Dices 'nunca había pensado en él de esa manera'

Dices 'pero...si he decidido algo'

Kylerhia dice '¿Qué has decidido?'

Dices 'cuando consiga el chal lo vincularé'

Rhilya habla con firmeza.

Kylerhia dice '¿Sabes que es algo muy íntimo, verdad?'

Kylerhia dice 'Y la mayoría de los vinculados... Ya sabes... Los rumores...'

Dices 'somos uña y carne, desde el momento en que supe que vendría, pensé en él como mi guardián'

Rhilya se ríe de las ocurrencias de Kylerhia.

Rhilya mueve la mano restándole importancia.

Kylerhia dice 'Espero que ambas consigamos el chal.'

Dices 'no creo que él me vea de esa manera'

Dices 'tu te has fijado en alguno?’

Kylerhia dice 'Yo le he echado el ojo a un soldado...'

Dices 'a un soldado?'

Parpadeas sorprendida!

Kylerhia dice 'Todo es hablarlo, Rhil. ¿Puedo llamarte Rhil?'

Dices 'claro, mis amigos me llaman Rhil'

Dices 'podemos ser amigas si quieres’

Sonríes a Kylerhia.

Kylerhia dice 'Oh...'

Kylerhia dice '¡Gracias!'

Sonríes alegremente.

Kylerhia dice '¡Por supuesto que quiero! Me pareces muy simpática.'

Sonríes a Kylerhia.

Kylerhia se sonroja ligeramente mientras aparta la mirada. Nunca ha tenido demasiados amigos.

Kylerhia dice 'Pues sí, he notado la presencia de un soldado en particular. La última vez lo vi por
los jardines...'

Dices 'quien es? como es?'

Kylerhia dice 'Creo que se llama Claiman o algo así, no estoy segura.'

Kylerhia dice 'Y es...'

Rhilya anima a Kylerhia a contarle.

Kylerhia dice 'Es rubio y de ojos marrones... Alto y corpulento...'

Te ríes disimuladamente.

Dices 'te gustan rubios?'

Kylerhia dice 'Depende.'

Dices 'o te gusta ese..rubio'

Kylerhia dice 'También me han gustado morenos...'

Kylerhia ríe disimuladamente.

Te partes de risa.

Kylerhia suspira profundamente.

Kylerhia dice 'Es muy guapo, la verdad.'

Te ríes disimuladamente.

Dices 'sabes que para ser guardián tienen que ser más que guapos no?'

Te partes de risa.

Kylerhia dice 'Lo sé...'

Kylerhia dice 'Hay rumores... Quizá entre como cachorro... No lo sé.'

Dices 'sería estupendo....sobre todo para ti’

Rhilya le da un codazo cariñoso a Kylerhia.

Kylerhia dice 'Todavía queda mucho para eso de todos modos.'

Dices 'crees que él se ha fijado en ti?'

Kylerhia dice 'No lo sé... No creo. No dejo de ser una novicia más, Rhil.’

Kylerhia dice 'Míranos con estos vestidos...'

Rhilya se mira el vestido blanco de novicia.

Kylerhia acaricia su vestido con nerviosismo.

Dices 'a mi no me disgusta del todo'

Rhilya se levanta y se estira el vestido.

Kylerhia dice 'Ni a mí. Pero hay conocimiento que no se nos permite alcanzar, y eso me frustra.'

Dices 'le he hecho un par de ajustes, y con el fajín que me puse se ajusta bien, no está tan mal'

Rhilya da una vueltecita haciendo ondear la falda.

Te ríes disimuladamente.

Kylerhia se levanta junto con Rhil y también ella se estira el vestido.

Kylerhia dice 'No está nada mal, no. Mis felicidades.'

Kylerhia observa con ilusión el vestido de Rhilya.

Sonríes alegremente.

Kylerhia dice '¿Me ayudarías a mejorar un poco los míos?'

Dices ‘Claro, Inila, la encargada del servicio en mi casa, es muy diestra con la costura, me enseñó un par de trucos’

Rhilya sonríe al recordar a su niñera.

Dices 'a mí me gustaría poder practicar a todas horas....pero no se nos permite'

Kylerhia dice 'Me pasa igual. Solamente podemos practicar si hay una aceptada o hermana delante...'

Kylerhia dice 'Y creo que podría avanzar mucho más si practicara por mi cuenta también.'

Dices 'quizás podríamos hablar con alguna de las aceptadas'

Dices 'si pasamos más tiempo con ellas, podríamos practicar más a menudo...'

Kylerhia dice 'Están muy ocupadas, no sé yo...'

Dices 'son muy estiradas'

Te ríes disimuladamente.

Dices 'creen que ya visten el chal'

Kylerhia ríe disimuladamente.

Kylerhia dice 'Totalmente.'

Kylerhia dice '¿Con qué aceptada crees que podríamos hablar? No sé quién es más altanera que quién, la verdad..'

Dices 'no he hablado con ninguna...solo crucé unas palabras con la chica que me condujo a las
habitaciones el primer día'

Dices 'parecía amable'

Dices 'pero.. no recuerdo su nombre'

Kylerhia dice 'Yo no he intercalado palabras con ninguna, salvo en lecciones, por supuesto.'

Dices 'me acabo de acordar'

Kylerhia dice '¿Sí?'

Dices 'del nombre no'

Te partes de risa.

Kylerhia dice '¿De qué te has acordado, Rhil?'

Dices 'me acabo de acordar que tenemos que aprendernos 15 modos distintos de tejer un tejido de curación'

Dices 'quizás deberiamos ponernos a estudiar ya'

Kylerhia dice 'Ay no...'

Rhilya suspira.

Kylerhia dice '¡Es verdad! ¡Sólo llevo 5!'

Kylerhia dice 'Será mejor que vayamos a la biblioteca entonces, sí.'

Kylerhia dice 'Si no... Oh, Luz. No quiero saberlo.'

Dices 'Kylerhia mañana tenemos que haberlo aprendido, vámonos corriendo'

Rhilya coge la mano de su nueva amiga y sale corriendo en dirección a la Biblioteca.

Kylerhia sigue a su amiga con prisa, no vaya a ser que no les de tiempo.

BIENVENIDA A SHANIA A LA TORRE BLANCA

Publicado: 22 Ene 2023, 17:49
por Rhilya
Leer este rol para continuar con la trama:

viewtopic.php?p=233#p233

Seguido de este tema:

viewtopic.php?p=234#p234

:)

EN LOS ESTABLOS

Publicado: 24 Ene 2023, 12:18
por Rhilya
Participantes: Rhilya y Galor
Punto de vista: Rhilya

Sentía como todo su cuerpo se estremecía, si cerraba los ojos notaba el roce de la zapatilla sobre su piel otra vez. Un escalofrío le recorrió el cuerpo, sabía que esto podía suceder, se lo habían advertido. Claro, que una cosa era escuchar las amenazas de los castigos de la Maestra de Novicias, y otra muy distinta vivirlo en sus propias carnes.

Se habían pasado de la raya, lo sabía, quizás en otros lugares fuese una trastada sin importancia, pero aquí no se andaban con chiquitas, de eso ya se estaba dando cuenta. Las Aes Sedai no eran solamente mujeres encauzadoras. Siempre tuve respeto por ellas, como ciudadana de Tar Valon, las conocía desde que tenía uso de razón, mujeres que con una sola mirada hacían que te estremecieras, que quisieras servirles o incluso te transmitieran la fortaleza necesaria para realizar cualquier tipo de hazaña, pero aun no comprendía la magnitud de ese título.

Hasta este momento no había sido consciente que la estricta disciplina que se exigía en la Torre Blanca, y la razón por la cual no se tolerasen este tipo de comportamientos, no solo era por su educación. Lo que para otros ojos pudieran resultar ser cosas de niños, para una hermana no era si no malgastar la energía y el tiempo, tan valioso y necesario, para estudiar y mejorar en el uso del Poder Único. La Última Batalla se acercaba, y no había tiempo que perder. Y no solo eso, aquello que le había pasado a esa chica…consumirse por el Poder Único por un descuido tan tonto. Podría haberles pasado a cualquiera de ellas, las muy necias.

El Poder Único….se había acostumbrado a la sensación de tenerlo a su alcance, a poder sentirlo fluir por su cuerpo, ¿qué sería de ella si no pudiera alcanzarlo jamás? Ahora podía entender a Shania, la frustración y el miedo de su amiga cuando no podía alcanzar la Fuente, siempre pegada a ese vaso de agua.

La Maestra de Novicias tenía razón, no podía volver a infringir las normas de esa manera. Entendía que debía formarse para no ser un peligro para otras personas, pero nadie le había explicado que su niñez había acabado en el momento que cruzó el umbral de la Torre Blanca.

La joven dejó escapar un sollozo. Las lágrimas recorrían su rostro mientras se sentaba al lado de unos fardos de heno, utilizando sus piernas para no apoyarse sobre el duro suelo.

No sabía cuánto tiempo había pasado, cuando alguien entró al establo.

Galor camina distraídamente por los establos casi sin fijarse en lo que le rodea.

Rhilya llora sin cesar.

Rhilya se tapa la cara con las manos y sigue sollozando.

Galor observa, con la cabeza en otro sitio, los caballos. Vagamente el pensamiento de que algún día tendrá uno tan bueno como los que hay en el establo acude a su mente.

Rhilya no puede creer que haya sido tan estúpida de quedarse en la fiesta...ni siquiera sabe cómo no la han expulsado.

Galor continúa caminando y se percata de que no está solo en el lugar. Alerta, encamina sus pasos hacia quien sea que esté allí, aparentemente llorando.

Rhilya piensa que quizás si hubiera seguido a Galor...pero no, fue un obstinado cabeza dura…

Rhilya continua llorando, coge aire y le entra hipo, lo que hace que llore con más fuerza.

Galor llega al fondo del establo y frunce el ceño, agachándose para fijarse en quien sea que esté, menudo sitio al que ir a llorar.

Rhilya está tan sumida en sí misma que no se percata de la presencia de alguien más.

Galor rodea los fardos y finalmente reconoce a su amiga.

Galor susurra 'Luz, Rhil...'

Rhilya levanta la mirada reconociendo a su amigo.

Rhilya intenta levantarse para irse pero emite un quejido al hacerlo.

Galor se percata del gesto de la chica y suspira.

Susurras 'qué haces aquí Galor?'

Galor dice 'eso mismo iba a preguntarte yo a ti'

Galor dice 'Qué te ha pasado, Rhil?'

Rhilya hace como si no le doliese nada, pero no puede evitar que se note que no puede sentarse bien.

Dices 'Cómo si te importase algo...'

Rhilya gira la cabeza en un intento de enfado, pero vuelve a ponerse a llorar.

Galor la mira y frunce el ceño.

Galor permanece en silencio, algo le pasa y está en su modo cabezota habitual.

Rhilya no puede mirar a la cara a su amigo, tenía razón al irse, pero la dejó sola, sin poder explicarse y encima...todo había acabado de la peor manera posible.

Galor se deja caer al lado de la chica, ya hablará, si le apetece hacerlo. Y si no lo hace, todavía puede incordiarla hasta que lo haga por pura molestia.

Galor dice 'qué te ha pasado, Rhil?'

Rhilya vuelve la cabeza cuando nota la mano del chico sobre su rostro.

Dices 'cuando te fuiste...'

Dices 'todo se desmadró'

Rhilya se seca las lagrimas con la mano.

Galor dice 'Eh... No llores, cabezota'

Dices 'vino Anari Sedai y...estaban todos en mi cuarto, además…Claiman trajo botellas de licor'

Galor pasa un brazo por los hombros de la chica.

Galor murmura algo sobre cachorros imbéciles.

Dices 'se enfureció...no había visto a la Maestra jamás tan enfadada'

Dices 'los sacó a todos de allí y esta mañana vino a buscarme'

Rhilya habla con la voz entrecortada a causa del disgusto.

Galor dice 'Y?'

Dices 'pensé que iba a expulsarme Galor..'

Dices 'cómo no iba a hacerlo si habíamos incumplido todas las normas posibles'

Galor dice 'No te han expulsado, ¿verdad?'

Dices 'gracias a la Luz que no ha sido así.. '

Galor dice 'entonces?'

Al cachorro le falta información, algo se le escapa y no le gusta perderse cosas.

Dices 'me azotó tanto que ya no sabía cuanto tiempo llevaba allí'

Galor dice 'Te... qué?'

Asientes a lo que ha dicho Galor.

Dices 'no puedo ni sentarme...dijo que así recordaría todo lo que habíamos hablado, y desde luego no se me va a olvidar'

Galor suspira. No tiene idea de cómo funciona la torre salvo por lo poco que sabe sobre los guardianes.

Galor dice 'Luz, Rhil'

Dices 'trajo a una chica, una criada, perdió el acceso a la Fuente por culpa de una noche con licor'

Dices 'yo no sabía que eso podía pasar, Galor'

Galor se pregunta durante unos segundos por qué nadie le ha avisado de aquello. Si no se puede hacer algo, lo lógico sería avisar de ello.

Dices 'La Maestra me hizo ver el peligro que conlleva incumplir las normas...'

Galor dice 'Pero bueno, ya pasó, no, Rhil?'

Dices 'no, no pasó...estoy toda azotada, me siento fatal y encima tu te fuiste...y no me dejaste ni hablar'

Galor dice 'Rhil, avisaste a media Torre'

Dices 'no avisé a nadie!'

Dices 'acaso crees que soy tan estúpida como para montar una fiesta a propósito, y en mi cuarto?'

Galor suspira profundamente.

Dices 'no sé cómo acabaron todos allí, yo solo quería estar contigo'

Galor frunce el ceño.

Galor dice 'Lo siento, Rhil.'

Rhilya mira hacia el suelo y termina de secarse un par de lágrimas que caían solitarias por sus mejillas.

Galor dice 'No llores'

Galor dice 'Llorar te hace fea'

Rhilya mira a Galor y frunce el ceño.

Dices 'al menos a mi se me pasa cuando termino de llorar, idiota'

Galor sonríe levemente y abraza a la chica.

Rhilya le devuelve el abrazo y sonríe.

Susurras 'no vuelvas a dejarme sola, cabeza dura'

Galor dice 'la próxima vez'

Galor dice 'Los echaré a todos'

Sonríes a Galor.

Rhilya abraza fuertemente a su amigo y deja escapar un suspiro.

Galor dice 'Y si tu no les avisaste...'

Galor dice 'Por qué sabían...?'

Dices 'las chicas me siguieron....ellos no tengo ni idea, ni siquiera los conocía'

Galor dice 'Bueno, solo tenemos que encontrar otro lugar para reunirnos la próxima vez'

Dices 'qué propones..? '

Galor dice 'Déjame buscar un sitio mejor'

Galor susurra 'Y te dejaré una nota'

Dices 'A partir de ahora tendré los ojos de Anari Sedai sobre mi nuca...las próximas dos semanas tengo que cumplir el castigo que me ha impuesto'

Galor pregunta 'Te ha castigado?'

Asientes a lo que ha dicho Galor.

Galor dice 'con qué?'

Galor se alegra de haberse largado de allí en su momento.

Dices 'Todos los días tengo que preparar el desayuno, tras acudir a las clases, realizar informes con Zelanna Sedai, y tras preparar la cena, fregar todas las ollas de las cocina...esas que son gigantes y cabe todo tu cuerpo en ellas'

Galor dice 'Luz'

Galor piensa que olvidarse del castigo no se va a olvidar en un tiempo.

Galor dice 'Eso es...'

Galor dice 'Es demasiado, ¿no?'

Dices 'Ten cuidado porque la Maestra piensa que estabas en la fiesta, no se por qué, traté de decirle que no estabas pero...no quiso escucharme'

Galor dice 'Descuida, Cabezota. Me las apañaré'

Dices 'es agotador...solo quería llorar después de todo el día fregando, con el trasero en carne viva y teniendo que disimular ante el resto de novicias'

Galor dice 'Por qué tienes que disimular?'

Galor no quiere pensar que la obliguen a ello. No tiene lógica.

Dices 'porque no quiero que me estén atosigando a preguntas....ya bastante ha dado que hablar todo lo relacionado con la Noche de Invierno'

Dices 'no necesito a novicias cotillas que no hagan mas que cuchichear a mi alrededor'

Dices 'el castigo queda entre la maestra de novicias y yo, y ahora tú...'

Galor pregunta '¿Novicias cotillas?'

Galor sonríe alegremente. La chica no se ha dado cuenta que se ha insultado a sí misma.

Dices 'si...acaso no has visto a alguna novicia que no sea cotilla?'

Te partes de risa.

Dices 'excluyéndome a mi, por supuesto'

Galor dice 'Por supuesto que sí'

Le sacas la lengua a Galor.

Galor dice 'Rhil'

Galor dice 'Te puedo pedir un favor?'

Dices 'si?'

Galor levanta un dedo y le da un par de golpecitos en la cabeza.

Galor dice 'Piensa antes de actuar!'

Pones los ojos en blanco. Si es que...

Galor dice 'al final me convertiré en guardián antes que tú en sedai'

Dices 'eso es imposible, listillo'

Galor dice 'y me vinculará una sedai vieja, de esas que se pasan la vida entre libros'

Te partes de risa.

Galor dice 'y moriré de aburrimiento'

Dices 'desde luego es lo que te mereces por cabezota, sabelotodo y... y redomadamente idiota'

Galor dice 'Yo?'

Dices 'si eso pasa entonces tendré que vincular a un joven apuesto y fuerte '

Te ríes disimuladamente.

Galor dice 'Pues ya sabes'

Galor dice 'Tendrás que conseguir ser sedai antes que yo guardián'

Galor dice 'Y lo veo... Difícil'

Rhilya se acerca a su amigo y le susurra en el oido.

Susurras 'no dejaré que te vincule nadie que no sea yo'

Galor la mira divertido.

Galor susurra 'segura, Rhil?'

Rhilya sonríe con picardía

Susurras 'aunque me cueste la expulsión'

Te ríes disimuladamente.

Susurras 'no dejaré que ninguna sedai vieja y aburrida te eche las garras'

Galor sonríe burlonamente, con intención de picarla y evitar que vuelva a cabrear a la maestra de novicias.

Galor dice 'cuando lo vea lo creeré. De momento asumiré que mi destino está sellado en forma de libros y tazas de té'

Rhilya suelta una carcajada y se acomoda en el hombro del chico.

Rhilya cierra los ojos y se imagina con el anillo de la Gran Serpiente en su dedo y a Galor dando espadazos a diestro y siniestro.

Galor la mira interrogante, para encontrársela con los ojos cerrados.

Galor dice 'HM?'

Rhilya sonríe y abre un ojo, viendo a Galor mirándola embelesado.

Dices 'estaba imaginando lo bien que te quedará la capa de Guardián'

Galor dice 'Por supuesto que me quedará bien'

Galor dice 'Lo dudas?'

Dices 'claro que no, te la tendré que hacer yo...y yo coso muy bien'

Te ríes disimuladamente.

Galor dice 'Me camuflaré y libraré al mundo de la sombra a tajos en el cuello'

Te partes de risa.

Galor sonríe alegremente.

Dices 'ya sabes hacer algo más que el saludo al sol?'

Te ríes disimuladamente.

Galor dice 'Sabes que sí, idiota'

Galor dice 'Te escribí la última nota explicando todo al detalle. Soy genial'

Te partes de risa.

Dices 'si, algo como que cortabas seda y saludabas a cortesanos...o algo parecido'

Galor la mira fastidiado. No ha entendido nada.

Galor dice 'Sabes tú algo más que hacer lucecitas y mover el aire?'

Dices 'por supuesto que si, puedo descubrir objetos ocultos a los ojos’

Galor no puede ocultar la sorpresa.

Galor dice 'Puedes hacer eso?'

Rhilya asiente orgullosa.

Galor dice 'entonces...'

Galor sonríe más ampliamente.

Dices 'que..'

Galor dice 'Puedo esconder más las notas!'

Rhilya sonríe divertida a Galor.

Galor dice 'Así será más fácil hablar contigo cuando no pueda hablar contigo, ya me entiendes'

Dices 'cuando sea Aceptada podré salir a la ciudad'

Dices 'espero que entonces sea todo más fácil...al menos para poder vernos'

Galor dice 'No lo sé'

Galor dice 'Supongo que mi entrenamiento será más difícil'

Dices 'si..el mío también, y no se ni cómo...hasta ahora es lo más sacrificado que he hecho nunca'

Galor dice 'Aunque yo ya he salido de la ciudad'

Dices 'ah si?'

Dices 'dónde has ido?'

Dices 'no me lo habías contado!'

Galor dice 'Me he recorrido medio mundo!'

Rhilya le da un manotazo cariñoso a Galor.

Galor dice 'Me mandaron una misión importantísima'

Dices 'si claro!'

Galor dice 'Para...'

Galor hace una pequeña pausa.

Rhilya mira expectante a Galor.

Galor dice 'Para... Enseñarme a tener paciencia'

Galor dice 'Rhil, lo más aburrido que he podido hacer en toda mi vida'

Ruedas por el suelo riendo sin control.

Dices 'te lo tienes merecido'

Rhilya se rie sin parar.

Galor dice 'Entregar cartas de un lado a otro. Casi me muero de aburrimiento'

Galor la mira fastidiado.

Dices 'ya sé que te mandaré hacer cuando seas mi guardián y te pongas quejica '

Te ríes disimuladamente.

Galor dice 'Me pones muy difícil querer ser tu guardián entonces.'

Dices 'solo cuando te pongas cabezota y quejica...'

Galor dice 'Además, tú también eres cabezota!'

Dices 'si te portas bien..te dejaré venir conmigo al frente de las batallas'

Te partes de risa.

Dices 'yo no soy nada cabezota...no se por qué dices eso'

Galor dice 'Ah, es que piensas que te voy a dejar ir a una batalla sin mí?'

Galor dice 'Eso va en contra de las reglas del buen guardián'

Te partes de risa.

Dices 'aun no tengo ni el anillo...'

Rhilya se mira la mano sin ningún adorno.

Galor susurra 'pero lo tendrás, Rhil. Lo tendrás'

Dices 'ya llevamos dos años aquí...'

Suspiras profundamente.

Galor sigue la mirada de la chica y sonríe.

Dices 'a lo mejor tengo que irme contigo de viaje a buscar la paciencia esa que dicen que hay que tener'

Te ríes disimuladamente.

Galor ha tenido una idea, se encargará de ello cuando pueda volver a pisar la ciudad.

Galor ríe disimuladamente.

Galor dice 'No estaría mal'

Galor dice 'Al menos sería más divertido'

Sonríes a Galor.

Rhilya siente que el tiempo ha pasado volando y da un respingo.

Susurras 'Luz Galor'

Galor sonríe levemente.

Dices 'Sabes la hora que es?'

Galor dice 'Cuando nos volvamos a ver'

Galor dice 'Tendré una sorpresa para ti'

Rhilya mira a Galor sorprendida.

Galor dice 'Pero como soy muy mal guardián y esas cosas'

Dices 'un regalo??'

Galor dice 'Te dejaré con la intriga.'

Rhilya se abalanza hacia Galor con una sonrisa de oreja a oreja.

Galor estruja a la chica en un abrazo. La ha echado mucho de menos.

Susurras 'eres el mejor guardián del mundo'

Galor susurra 'cuídate, cabezota'

Galor sonríe alegremente.

Galor dice 'Ya me lo dirás cuando matemos al primer myrddraal'

Rhilya llena de besos las mejillas del chico...no sabe cuándo lo volverá a ver.

Sonríes a Galor.

Galor se levanta y le tiende la mano a la novicia.

Rhilya deja que Galor le ayude a levantarse.

Galor susurra 'Anda, vámonos. Que si no al siguiente que azotarán será a mí'

Asientes a lo que ha dicho Galor.

Susurras 'espero que podamos vernos pronto'

Rhilya da un último beso a su amigo y sale disparada en la otra dirección.

Galor le dedica una última sonrisa y abandona los establos con una idea en mente.

Rhilya regresó a su cuarto con una sonrisa. Él siempre la encontraba. Galor sabía como llevarle del llanto a la risa sin esfuerzo. Había sido su peor día en la Torre y aún así, gracias a él, ya no le pesaba tanto el castigo. Alcanzaría el chal, lo vincularía y no se volvería a alejar de él.

LA ÚLTIMA TAREA COMO NOVICIA

Publicado: 28 Ene 2023, 18:36
por Rhilya
Habían pasado años desde que Rhilya se inscribió en el Libro de Novicias, ahora era una jovencita más madura, recordaba con ternura aquellas travesuras que la habían llevado al despacho de la Maestra de Novicias más de una vez. No solo había mejorado en el uso del Poder Único, también su carácter se había forjado con cada año que pasaba. Había aprendido a respetar las normas de la Torre Blanca, ya no era aquella niña que ignoraba las que no le gustaban. La paciencia era una virtud que aún se le resistía, y seguía siendo bastante obstinada, pero había aprendido a enfocarlo en su estudio.

Su cuerpo también había cambiado. Había crecido 4 pulgadas al menos, su silueta de mujer ya no solo se intuía, si no que las pronunciadas curvas hacían que el vestido de novicia se ajustase a la altura de su pecho y su trasero formando unas curvas perfectas. Ya no llevaba el cabello con un lacito entrelazado, si no que lo dejaba suelto, largo hasta la mitad de su espalda, sujetando los mechones que le caían sobre la cara con una fina cinta blanca.

Rhilya suspiró mientras seguía escribiendo. Se encontraba en uno de los depósitos de armas de la Torre Blanca, junto a ella, Valemia Sedai del Ajah Verde. Se le había encomendado la tarea de organizar y realizar fichas de todas las dagas que se encontraban allí. Cada ficha contenía el material de fabricación y las propiedades de dichas dagas, así como su origen. Lo que parecía un trabajo de unas horas, acabó siendo de una semana, había más de cien dagas en ese depósito y tenía que identificarlas una por una.

A decir verdad no era un trabajo que le disgustara, Rhilya se entretenía examinando cada una de ellas, ella misma poseía en su casa una magnífica colección de dagas, era una afición que solo su padre y Galor conocían.

A pesar de lo que disfrutase con esta tarea, era algo repetitiva, por lo que Rhilya se alegró al llegar a la última de las fichas.

Valemia Sedai se acomoda en la silla - Mira Rhilya, esta daga es muy especial, ¿has observado las marcas que tiene? - La Aes Sedai disfrutaba tanto como ella. Admiraba mucho a Valemia Sedai, era del Ajah Verde y sus guardianes siempre andaban cerca, dos de ellos se encontraban sentados, afilando sus espadas, en unas sillas al lado de una mesa auxiliar que se encontraba en la habitación. Quizás Valemia Sedai había visto que ponía más atención a las clases que impartía ella, ya que siempre involucraban tejidos de ataque, y es por ello, que siempre que podía la mandaba llamar para que la joven la atendiese personalmente.

Ficha 100

Descripción: Una daga especial.
Material: Acero.
Propiedades: La daga es humeante y supura gotas de ácido. Dada su forma, estilizada y ligera, aporta a aquel que la blande facilidad de ataque. La empuñadura, de un extraño material, facilita la defensa contra el objetivo. La gema que porta como adorno, refleja la luz, y puede inducir al rival a una distracción siendo más vulnerable a ataques mentales.
Origen: Maradon

Terminó de escribir la última ficha, espolvoreó un poco de arena y dejó secar la tinta. Se acercó a una de las mesitas auxiliares y preparó un té para Valemia Sedai y los guardianes.

Gracias, pequeña - dice Valemia Sedai - Ha sido un día muy largo. - La hermana del Ajah Verde aprovechó estos minutos de descanso para ahondar en las inquietudes de la pequeña novicia. - Rhilya, siéntate aquí conmigo. - La chica obedece y se sienta junto a la Aes Sedai.

Te he observado estos últimos años, tienes mucho potencial, tus tejidos son fuertes e incluso aquellos en los que predomina el uso del Fuego, y ya se sabe la rareza de esta afinidad en las mujeres. - observa a la joven mientras bebe de su té.

No entiendo del todo el por qué, Valemia Sedai, pero siento que los tejidos que contienen hilos de fuego puedo realizarlos con más precisión que otros, se qué no es lo más común…al parecer son los hombres quienes dominan esa afinidad con mayor soltura. - Rhilya bebe un sorbito del té, está delicioso.

Los tejidos de ataque y las salvaguardas son fundamentales para el combate, Rhilya, una joven como tú, que tiene un talento natural para las afinidades de Fuego y Energía, podría realizar tejidos muy poderosos con estos elementos. - Se detiene un momento mientras escruta a la joven con la mirada y da un pequeño sorbo a su taza de té - La Luz sabe que la Última Batalla se acerca, y es deber del Ajah Verde encontrar a aquellas mujeres con más talento para unirse al batallón.

Rhilya escucha conmocionada a la Aes Sedai, ¿acaso le estaba diciendo aquello que siempre había soñado? ¿Podría algún día pertenecer al Ajah Verde, al Ajah de la Batalla?

Valemia Sedai… - sonríe a la hermana - sería un honor para mí ser una de esas mujeres.

Creo firmemente que superarás la prueba de Aceptación sin problema. - La Aes Sedai mira a la novicia esperando su reacción.

Rhilya casi se atraganta por la sorpresa - ¿En verdad lo creéis así? - pregunta esperanzada la joven.

Valemia Sedai asiente a la pregunta de la chica - Estate preparada, pues ya está decidido, mañana acudirás junto a la Maestra de Novicias a la prueba de aceptación. - La Aes Sedai se levanta y Rhilya hace el mismo movimiento.

Rhilya no puede ocultar su felicidad, su amplia sonrisa y el brillo de sus ojos la delata.

Muchas gracias Valemia Sedai, no la defraudaré - deja la taza de té sobre la bandeja, y recoge las tazas vacías.

Preséntate mañana en el despacho de la Maestra de Novicias con la Tercera Campana y afronta la prueba con valentía - sonríe a la novicia.

Rhilya asiente con determinación.

Disculpe, Valemia Sedai, si eso es todo - Rhilya espera a que la hermana asienta con la cabeza, realiza una reverencia, recoge la bandeja y sale del depósito de armas con una sonrisa de oreja a oreja.

Mañana sería el gran día. Llevaba años esperando y ahora estaba echa un manojo de nervios. Tenía tantas ganas de contárselo a Galor….tendría que esperar. No quería incumplir ninguna norma y menos aún cuando quedaban a penas unas horas para ser Aceptada de la Torre Blanca.

ASCENSO A ACEPTADA

Publicado: 11 Abr 2023, 00:12
por Rhilya
Al día siguiente, Rhilya había acudido al despacho de la Maestra de Novicias a la hora acordada, pero no la encontró allí, regresó a su cuarto confundida. Llevaba nerviosa todo el día, ya era tarde, igual había malinterpretado a Valemia Sedai. Cuando iba a alcanzar la cama, la llamada a su puerta la detuvo y se apresuró a abrir. Ante ella se encontraba la Maestra de Novicias.

- Rhilya, se solicita tu presencia para ser ascendida a Aceptada - la Maestra miró fijamente a la novicia.

Rhilya realizó una reverencia atropellada de la emoción.

- Sabes que tienes tres oportunidades para negarte si no te sientes preparada, pero a la tercera se te expulsará de la Torre para siempre - prosiguió con calma - Por tanto, estás lista?

Rhilya estaba nerviosa, pero asintió con firmeza y dijo:

- Si, Anari Sedai, estoy lista.

- Entonces, sígueme - finalizó Anari Sedai dando media vuelta.

Rhilya se alisó la falda, y salió de su cuarto siguiendo a la Maestra de Novicias. Juntas atravesaron el patio interior del Ala Oeste de la Torre Blanca y llegaron hasta la galería principal donde se encontraba una puerta cerrada. Al abrirla, Anari Sedai desveló unas escaleras que bajaban hacia los sótanos de la Torre Blanca.

Ambas bajaron por la escalera de pequeños peldaños, con una pendiente muy pronunciada, hacia las profundidades de la Torre.

Los sótanos tenían una belleza imponente. El pulido suelo de piedra estaba nivelado con esmero. En lo alto de las paredes ardían lámparas que, a buen seguro, habrán encendido alguna hermana o una Aceptada utilizando el Poder Único.

La abovedada estancia había sido excavada en la roca sobre la que se asienta la isla, la luz de las lámparas de altos pedestales se reflejaba en pálidas y lisas paredes de piedra. Bajo el centro de la cúpula había una estructura compuesta de tres arcos de plata redondeados, con la altura justa para que una persona pueda pasar por ellos, asentados en un grueso anillo de plata y unidos en sus extremos. Arcos y anillo forman una sola pieza.

Tres Aes Sedai, vistiendo su chal y rodeadas por el aura que indicaba que abrazaban el Saidar, permanecían sentadas en cada punto de conjunción de los arcos con la base, absortas en el Ter’angreal. Otra, que portaba un chal verde, la observaba junto a una mesa, que contenía tres cálices de plata.

Un parpadeante brillo incrementaba progresivamente su fulgor en el interior de los arcos.

Rhilya llegó a la sala con las manos frías, observó la estancia, tratando de pensar cuántas mujeres antes que ella habrían pasado por esta situación.

- Bien. Ahora te diré dos cosas que ninguna mujer escucha hasta hallarse en tus presentes circunstancias. Una vez que hayas comenzado, debes continuar hasta el final. - la maestra se detuvo un momento para que la chica asimilase la información - Si te arredras en cualquiera de las fases, se te expulsará de la Torre igual que si te hubieras negado a empezar a la tercera oportunidad. La segunda cuestión es ésta: quien busca, quien lucha, se expone al peligro.

Rhilya escuchó atenta a su maestra. La Aes Sedai prosiguió con su discurso:

- Algunas mujeres han entrado, y no han salido jamás. Cuando se aquietó el funcionamiento del Ter'angreal, no... estaban... allí. Y nunca las han vuelto a ver. Si quieres sobrevivir, has de ser inquebrantable. Si titubeas o desfalleces - el silencio de la hermana fue elocuente, Rhilya palideció - Ésta es tu última ocasión. Puedes volverte ahora y aún te quedarán dos oportunidades para intentarlo. Si aceptas, no hay posibilidad de retroceso. No es vergonzoso negarse. Elige.

Anari Sedai miró a la muchacha con una leve sonrisa de ánimo.

- Acepto, Anari Sedai - Rhilya estaba segura, no había vuelta atrás, haber llegado hasta este momento era muy importante para ella y no iba a echarse atrás.

- En ese caso, prepárate - Rhilya se desnudó lentamente y dobló su ropa con cuidado en el suelo, dejando todas sus pertenencias a su lado, se miró el dedo y con cariño se quitó el cordón que había sido regalo de Galor y lo guardó bajo el vestido.

Cuando Anari Sedai vio que la chica estaba lista, caminó junto a ella hacia los arcos.

Rhilya sonrojada, por la desnudez de su cuerpo, avanzó tras la maestra.

¿A quién traes contigo, hermana? - preguntó la hermana del Ajah verde.

Una que acude como candidata a la Aceptación, hermana - contestó la Maestra de Novicias.

Rhilya escuchaba la ceremonia con atención tratando de calmar sus nervios.

¿Está dispuesta?

Está preparada para dejar atrás lo que era, y, ahondando en sus temores, ganar la Aceptación.

¿Conoce sus temores?

Nunca los ha afrontado, pero ahora es su voluntad hacerlo.

Entonces deja que los afronte.

Anari Sedai miró seriamente a la novicia, aunque su tono de voz era suave y tranquilizante.

- La primera vez, es por el pasado. El camino de retorno sólo aparecerá una vez. - Anari Sedai empujó suavemente a Rhilya hacia el primer arco, que brillaba con fuerza - Ten firmeza.

Rhilya contuvo el aliento y entró en el Ter'angreal de iniciación.

<<La luz era cegadora, le atravesaba cada poro de su piel.

Se encontraba en una isla, lo sabía o lo recordaba…no estaba segura. Se alisó el vestido y sonrío a su madre, cuando esta le ajustaba una tiara con diamantes en su cabello. Era uno de los días más felices de su vida.

Llegó su padre, y le ofreció su brazo, lo aceptó, y sonriendo salieron al exterior. Todos sus seres queridos se encontraban allí. Eynor le sonreía a un lado del arco de flores, sus ojos amarillos le hacían lucir enigmático, pero igual de guapo que siempre. A su lado, Galor, con un traje impresionante, del mejor sastre de Tar Valon. Su sonrisa no podía ocultarse al verles.

¿Galor? - pensó. Su rostro se difuminaba y daba paso a otro que por alguna razón no llegaba a identificar.

- El camino de retorno sólo aparecerá una vez. Ten firmeza. - Esa voz, le resultaba familiar…

Avanzó junto a su padre por el camino de flores que les conducía hasta ellos. A ambos lados, hermanas de distintos Ajah, Guardianes y algunos amigos les acompañaban en esta ceremonia.

La Sede Amyrlin se encontraba delante de una mesa elevada, con un lazo rojo en las manos. Una vez frente a él, su padre le dio un beso en la mejilla, y se sentó en el banco más cercano.

Rhilya le miró a los ojos y se cogieron de las manos. La Amyrlin comenzó la ceremonia.

- El camino de retorno sólo aparecerá una vez. Ten firmeza.

Nos hemos reunido hoy en este paraje tan bello para asistir a la solemne e igualmente bella union en matrimonio de Rhilya y Galor - La Amyrlin realiza una pausa introductoria - La Rueda del Tiempo gira y las eras llegan y pasan y dejan tras de si recuerdos que se convierten en leyenda.

....El rostro de Galor volvió a cambiar al de otro hombre, no sabía quién era, pero por algún extraño motivo le confiaría su vida....

- La leyenda se difumina, deviene mito, e incluso el mito se ha olvidado mucho antes de que la era que lo vio nacer retorno de nuevo. - sigue solemnemente - En la llamada tercera era por algunos, una era que ha de venir, una era transcurrida hace mucho, comienza a soplar un viento en la Isla de Tremalking.

- El camino de retorno sólo aparecerá una vez. Ten firmeza.

- El viento no es el inicio, pues no existen comienzos ni finales en el eterno girar de la Rueda del Tiempo. - La Amyrlin pausa brevemente su discurso. - Pero este es un principio.

....Las facciones se alternaban entre uno y otro....

La Sede Amyrlin sonríe a la pareja.

- El viento sopla y nos trae unos valores que definen vuestro sentir. Amor, lealtad, confianza y deseo son el viento que os llevara a través de los más oscuros caminos. El viento ha unido estos dos hilos del Entramado formando un nuevo hilo más fuerte.

....Esta ceremonia ya la había vivido antes, ya había estado aquí, no era ella, pero sin embargo…

- El camino de retorno sólo aparecerá una vez. Ten firmeza.

- Acercaos, por favor. - indica la Sede Amyrlin.

- Rhilya, Llamarada Helada, Guardiana de las Crónicas, aceptas a Crender como esposo, para amarlo, cuidarlo y respetarlo, en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, hasta que el Fuego Compacto os separe?

....¿Llamarada Helada? ¿Guardiana de las Crónicas? ¿Crender? - ¿Por qué le resultaba tan extraño a sus oídos el nombre de su Guardián? ¿Mi Guardián?...

Un arco de luz aparece de la nada a unos pasos tras la Sede.

- El camino de retorno sólo aparecerá una vez. Ten firmeza.

- Rhilya..?

Estaba confusa, deseaba casarse con él, era su destino, por qué entonces sentía que su deber era atravesar el arco.

Galor la miraba sin saber qué pasaba.

- Rhilya?

- El camino de retorno sólo aparecerá una vez. Ten firmeza.

Dejó de sostener su mano, odiaba dejarlo allí plantado, no quería separarse de él. Sin saber por qué lo hacía atravesó el arco de luz.>>

Confusa por todo lo vivido Rhilya salió del arco, ¿qué había pasado? ¿Quién era? ¿Había visto un retazo del Entramado? ¿Una vida pasada o un antepasado?

Sin dar tiempo a la novicia a reponerse, la hermana del Ajah Verde vertió un cáliz de agua sobre la cabeza de Rhilya.

Quedas limpia del pecado en que hayas incurrido y de los cometidos contra ti. Quedas limpia del delito que hayas podido perpetrar y de los que han sido dirigidos contra ti. Acudes a nosotras pura e inmaculada, en cuerpo y alma.

Anari Sedai mira a la muchacha y sigue hablando.

- La segunda prueba guarda relación con el presente. El camino de retorno sólo aparecerá una vez - Anari Sedai acompaña a Rhilya hacia el segundo arco, con una mano suavemente posada en su hombro dice - Ten firmeza.

Rhilya cierra los ojos y entra en el segundo arco.

<< Dos niños jugaban en el patio de una casa, comenzaron a correr y perseguirse, reían y cantaban. Era su hermano Eynor, le sonrío y comenzó a hacerle cosquillas. Se tumbaron en el césped cerca de los establos de la casa mirando el cielo, adivinando las figuras que las nubes dibujaban a su antojo. Al atardecer se acercaron a los establos, Eynor se aproximó a uno de los caballos, estaba encabritado y trataba de calmarlo, en cuestión de segundos, una coz le pateó el pecho, Rhilya echó a correr hacia él, tenía que socorrerlo, no respiraba, tenía que buscar ayuda.

- El camino de retorno sólo aparecerá una vez. Ten firmeza. - la voz resonó en su cabeza.

Eynor no se movía. No podía dejarlo allí.

El camino de retorno sólo aparecerá una vez. Ten firmeza. - no recordaba lo que significaba, pero algo le decía que no podía quedarse.

Ves destellar un arco plateado a unos pasos de ti.

Con lagrimas en los ojos miró hacia el arco, que titilaba y amenazaba con desaparecer. Avanzó hasta el mismo y lo atravesó. >>

Rhilya salió con el cabello pegado a la frente por el sudor, abrazada a sí misma. Mi hermano..lo he abandonado…

La hermana vertió de nuevo un cáliz de agua fresca sobre Rhilya.

- Quedas limpia del falso orgullo. Quedas limpia de falsas ambiciones. Acudes a nosotras purificada en cuerpo y alma.

La tercera vez hace referencia al futuro. El camino de retorno sólo aparecerá una vez - Anari Sedai acompañó a Rhilya de nuevo hasta el ultimo arco - Ten firmeza.

Rhilya atravesó el último de los arcos.

<< El Anillo de la Gran Serpiente brillaba sobre su dedo, como siempre, terminó de arreglarse el traje de montar, y miró a su alrededor, su habitación en los aposentos del Ajah Verde de la Torre. Por algún motivo se sentía como si fuera la primera vez que los viera, pero eso no tenía sentido, había ascendido al chal hacía ya años. Terminó de enfundar sus dagas y salió por la puerta.

Galor la esperaba fuera, desde que se vincularon, él era su sombra, y eso no la incomodaba.

- ¿Cuántos son? - le pregunté mientras atravesaba los corredores de la Torre.

- Más de trescientos - contestó preocupado - están contenidos por el momento, cuentan con Señores del Espanto….no se si podremos contenerlos mucho más tiempo.

- El camino de retorno sólo aparecerá una vez. Ten firmeza.

Apresuró su paso hasta uno de los balcones mientras observaba el ejército de la Sombra apostado en una de las puertas de la Torre. Frunció el entrecejo y dio media vuelta mientras apretaba el paso hasta llegar donde aguardaban otras Aes Sedai dispuestas para la batalla.

Se abrieron al Saidar y el cielo se llenó de rayos, que fueron correspondidos con terremotos en la Tierra, los trollocs salían volando por los aires y otros avanzaban furiosos espoleados por Myrddraal, arrasando todo por su paso.

Galor danzaba con la espada, cambiando de poses, aniquilando a todo engendro con el que se cruzaba. Sin previo aviso, el suelo se abrió bajo sus pies, la sorpresa inundó el vinculo, cuando uno de los Myrddraal le atravesó un costado.

- ¡¡¡Rhil!!! - exclamó Galor.

Rhilya sintió el dolor de su guardián como si ella misma hubiera sido apuñalada. Corrió hasta él, poniendo sus manos sobre el costado, comenzó a entrelazar los flujos de energía y aire para tejer la curación sobre su Gaidin cuando en su cabeza resonó de nuevo - El camino de retorno sólo aparecerá una vez. Ten firmeza. - No, no podía dejarlo, moriría si no recibía curación a tiempo.

Un arco de luz apareció a pocos metros.

- No..no le dejaré. - Rhilya gritó desesperada, apretó las manos sobre el pecho de Galor.

- Rhil…por favor…Rhil…

- El camino de retorno sólo aparecerá una vez. Ten firmeza.

Las lagrimas inundaban su rostro, debía atravesar el arco. Sintió como algo se le desgarraba por dentro. Avanzó hasta el arco y lo cruzó.>>

Rhilya salió jadeando del último arco y cayó de rodillas, llorando sin consuelo. Anari Sedai le acarició el pelo y le ayudó a incorporarse. El brillo del Saidar la rodeó cuando la Maestra de Novicias puso su mano sobre la cabeza de Rhilya realizando la curación sobre la novicia.

Una hermana de cada Ajah, cada una de ellas ataviada con su chal, la observaban desde su sitio, rodeando a la mujer que se había incorporado. La Sede Amyrlin se encontraba en la sala y fue la hermana del Ajah Verde quién le entregó el último cáliz de plata.

Rhilya se aproximó y se arrodilló en presencia de la Sede Amyrlin.

La Amyrlin tomó el último cáliz y lo virtió sobre la cabeza de Rhilya - Quedas limpia de Rhilya Mylien de Tar Valon. Quedas limpia de todo lazo que te vincula al mundo. Acudes a nosotras pura, en cuerpo y alma. Eres Rhilya Mylien, Aceptada de la Torre Blanca. Ahora estás ligada a nosotras.

Rhilya ha sido ascendido a Aceptada.

La Sede Amyrlin dejó a un lado en el cáliz y sacó un anillo de oro, el Anillo de la Gran Serpiente, de un cofre. Rhilya tendió la mano izquierda hacia la Sede Amyrlin y esta le puso el anillo de la Gran Serpiente en el dedo corazón de la chica.

Rhilya miró con los ojos llorosos el anillo de la Gran Serpiente.

La Amyrlin hizo un ademán y Rhilya se puso en pie.

- Bienvenida, hija - dijo la Sede Amyrlin, besándole las mejillas, dio un paso atrás y dirigiéndose a la Maestra de Novicias - Entregadle sus nuevas ropas. - Dicho lo cual la Amyrlin abandonó la abovedada sala, seguida del resto de Aes Sedai.

Anari le entregó un vestido blanco, con franjas de los colores de cada Ajah en los bordes. - Vístete, muchacha. Tus nuevos aposentos te están esperando - Anari Sedai sonrió con calidez a la chica, y esperó mientras recogía sus cosas.

Rhilya se vistió presurosa sin asimilar bien todo lo acontecido.

- Tienes el resto del día libre para descansar y pensar en las nuevas obligaciones que tendrás a partir de mañana. No tienes por qué hablar de lo sucedido en los arcos, la gran mayoría prefiere guardárselo para sí.

- Gracias, Anari Sedai.

Anari Sedai le hizo un gesto a Rhilya para que saliese con ella cuando hubiera terminado de recoger.

Rhilya terminó de recoger sus cosas y se apresuró a salir tras Anari Sedai. Su mente seguía dandole vueltas a todo...¿qué había sucedido? ¿había sido real....o un sueño? Sea como fuere...lo había conseguido, ya era Aceptada de la Torre Blanca.