Perspectiva Fado entrenador
Lo vi. Ingresar a las cuevas, con sus armas a la espalda.
Una especie de sonrisa cruel plasmada en su cabeza de oso.
Inspiré suavemente y sentí, sentí en el aire la tensión.
Algo cambiaría en las cuevas. Algo se avecinaba.
Asía tiempo no lo veía por aquí, desde que lo había enviado con Daigo y aquel otro humano a realizar algunas misiones.
El resonar de sus botas de metal asía eco en las cuevas silenciosas.
Decidí seguirlo, había sido entrenado por mí y quería saber que sucedería.
Se abrió espacio entre los demás integrantes del clan, repartiendo algún puñetazo y patada al que no le quería abrir el paso.
Solo mi presencia fue suficiente para que se apartasen y me dejasen llegar a unos pocos metros detrás de Krhadgul.
Una vez llegado a las puertas de las cuevas del clan Kno'mon emitió un potente rugido.
Krhadgul brama Krajtrimuel! Quierrrrro tu cabeza!
Krhadgul brama ¡Arhgurrrth tthhaarrnns hettharrrrr ghroooorrrrgghhhh!
Krhadgul brama ¡Seré yo quien acabe contigo!
Krhadgul brama ¡Seré yo quien a partir de este día gobierne el clan!
Krhadgul brama ¡Te desafío!
Sin sacar ninguna de las 3 armas que llevaba a su espalda, esperó firme y alerta.
No se escuchó ningún sonido. Ni siquiera una respuesta a los bramidos.
Pocos minutos después, de forma retumbante se escuchó un gruñido.
Krajtrimuel el jefe del clan kno'mon brama ¡No me arrebatarás el poder de este clan!
Krajtrimuel el jefe del clan Kno'mon brama ¡Antes tendrás que matarme, y un insignificante gusano no será capaz!
Krajtrimuel el jefe del clan Kno'mon brama ¡Acepto tu desafío!
Cual toro enfurecido Krajtrimuel cargó desde las cuevas con su Maza por delante.
Un enorme trolloc de unos casi 250cm apareció desde la entrada.
Vestido con su coraza con trofeos sangrientos colgados, partes de humanos y algún que otro trofeo arrebatado alguno de los otros clanes.
Aquel trolloc llevaba dominando el clan asía ya 20 años con mano dura y sin piedad.
Krhadgul había sido entrenado por mí, no iba hacer menos su crueldad y mano de hierro para gobernar el clan. Pero aún así sabría que bajo su puño el clan prosperaría entre los demás.
Sin miedo ninguno Krhadgul en un fluido movimiento sacó su hacha y frenó la carga de Krajtrimuel.
Ahí comenzó uno de los combates más brutales que e presenciado entre estos gusanos.
Krhadgul haciendo gala de su destreza y fuerza, y utilizando cada una de las cosas aprendidas bajo mi mando.
Rápidamente logró inflingir la primera herida en su contrincante.
Aunque logró pasar unos 15 minutos sin recibir heridas y en contraparte asestando varias a Krajtrimuel. Eso no podía durar por siempre.
Lenta pero progresivamente
El mayor tamaño del actual jefe de clan tenía que servir para algo.
Poco a poco comenzaron abrirse heridas en Krhadgul. Las púas en la maza del otro las iban abriendo.
Hasta que Krhadgul logró asestar un hachazo en la cara del engendro.
Su respuesta fue gruñir y realizar una maniobra.
Retrocedió y con inusitada velocidad, creo yo producto de la rabia por que según sus palabras, tal gusano le hiriera, acometió de una manera brutal.
Krajtrimuel el jefe del clan kno'mon gruñe ¡Muere miserable gusano!
El impacto fue brutal, el resonar del torso de Krhadgul y su peto de acero fue como un gong en las cuevas.
Ese golpe silenció a todos los presentes quienes bramaban y gruñían por la sangre que se estaba derramando y el combate singular que se llevaba acabo.
Sabía que eso no iba hacer que Krhadgul sesgara en su empeño. En su cometido.
Así lo había entrenado, seguir hasta la muerte, siempre en pos de su objetivo.
Krajtrimuel fue acercándose de apoco, pensando que el combate estaba terminado. Su maza ya elevada en toda la extensión de sus brazos, lista para bajar con furia sobre la cabeza de Krhadgul.
Desde un costado lo miré, y con un siseo sibilante le dije...
Un fado sisea Yo no te enseñe a quedarte en el suelo... levanta y termina con tu cometido...
Un fado sisea O me encargaré que nuestro señor te traiga devuelta a la vida, solo para colgarte del potro de tortura hasta que vuelvas a morir.
Un gruñido bajo y gutural salió de las fauces de Krhadgul.
En un solo movimiento se puso de pie justo cuando el jefe dejaba caer con toda su potencia la maza sobre el.
De un poderoso salto, se elevó por encima de Krajtrimuel, y dejando caer su hacha sobre la espalda del mismo posó sus pies sobre los hombros del gigantón.
Aplicando todo su peso y su fuerza obligó al mismo a ponerse de rodillas.
El desequilibrio de la enorme maza y la fuerza aplicada al golpe, que se suponía debería ser el final. Hizo que el jefe quedase desequilibrado y en desventaja ante la potencia del trolloc más pequeño.
Las púas en las suelas de las botas de Krhadgul hicieron que se afirmara en los huesos del contrincante.
El hachazo fue mortal, con increíble precisión fue ensartada en el centro de la espalda en la espina de Krajtrimuel.
El peso muerto del cuerpo al caer, y el hecho de que Krhadgul se encontraba firme sobre el trolloc más grande hicieron temblar las paredes.
Aquel engendro aún con todas las heridas y la herida final, seguía vivo. E intentaba luchar.
Todo eso fue hasta que Krhadgul arrancó el hacha de su espalda.
Un Chorro de sangre negra salió bañando la cara, las manos y el torso del ganador.
Krhadgul elevó su cabeza y emitiendo un poderoso rugido dio a conocer su poderío.
Krhadgul brama '¡Arhgurrrth tthhaarrnns hettharrrrr ghroooorrrrgghhhh!'
Con una cruel sonrisa dibujada en sus desfigurados rasgos sacó lentamente los pies de su contrincante. El cual emitió un gruñido lastimero y moribundo.
Para volver a plantarlos en la ya magullada espalda del mismo.
Krhadgul brama El poder es mío! El clan estará bajo mi puño de hierro!
Krhadgul brama Gruuuaaaooowrgrgrgrgr!
Lentamente inclinándose sobre el engendro caído, lo cogió por la cabeza de lobo y con la potencia de sus brazos se la arrancó de cuajo.
Elevando su musculoso cuerpo y brazos sostuvo la cabeza en alto, mirando a sus desde ahora súbditos.
Lanzando otro bramido arrojó la cabeza al aire para que se peleasen por ella, y bramó.
Krhadgul brama Hermanos!
Y señalando con su hacha el cuerpo del caído Krajtrimuel.
Krhadgul brama A comerhrhrhrrr!
Dando un salto atrás salió de encima del cuerpo para que los integrantes del clan se dieran un festín con el engendro caído.
Dándome la espalda para entrar a las cuevas, detectó mi presencia y viró su cabeza de oso para mirarme.
Aunque su mirada se dirigió al suelo, seguía con una mirada desafiante. Incliné mi cabeza en forma de asentimiento y lo vi. Ingresar a las cuevas a tomar posesión de su ahora clan.
(Relato) Ascenso a jefe de clan Krhadgul
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